DALIA ITZIK / JERUSALEM POST

Somos una nación que se queja , acerca de absolutamente todo. Pero hay cosas maravillosas, acerca de este país, de las que podemos estar orgullosos. Realmente, a los ciudadanos de este país les gusta mucho quejarse.

Acerca de todo. En ocasión del 63° cumpleaños  del estado, aquí hay 10 razones para no hacerlo.

1. El clima – Es cierto que podríamos usar un poco más de lluvia, y es verdad que a veces está un poco seco. Pero la gente de todas partes del mundo vuela miles de kilómetros para disfrutar del clima de este país.

2. Gente feliz – Nos gusta criticar y protestar, pero eso no nos hace dejar de sonreír. Incluso si somos un poco ásperos y los modales no son precisamente nuestro fuerte, somos gente feliz. Incluso clasificamos séptimos, de 124 estados, en el “índice de felicidad” llevado a cabo por el instituto Gallup recientemente. Los israelíes ensucian su entorno, pero cantan en voz alta, “¡Am Israel Jai!”

3. Kol Israel arevim ze laze [Todo el pueblo de Israel es responsable uno del otro] –  los israelíes brillan en las horas de crisis. No tienen parangón en darle una mano a los amigos – ¡y a los extraños! – necesitados.

4. La comida – En su pequeño espacio, Israel contiene la cocina, los sabores y los olores de todo el mundo. La comida israelí es la mejor del mundo y presumimos de algunos excelentes restaurantes, incluso sin las prestigiosas estrellas Michelin.

5. Cultura – Somos un país pequeño, pero rico en cultura; el pueblo judío es llamado el “Pueblo del Libro”, pero también ha demostrado ser una nación de cultura de todo tipo. Los teatros israelíes tienen mucho de qué enorgullecerse, incluso en comparación con sus homólogos de Broadway; nuestras películas siempre logran sorprendernos; escritores israelíes se leen en todo el mundo. Aunque de sólo 63 años, Israel es una potencia cultural creciente a ser tenida en cuenta.

6. La mente israelí – Criticamos el sistema educativo; siempre hay margen para mejorar. A pesar de ello, en los últimos años ha habido cinco israelíes ganadores del Premio Nobel, y nuestra industria de alta tecnología está floreciendo, gracias a nuestros jóvenes con mentes agudas y originales. ¡Una verdadera nación emprendimiento!

7. Un crisol – No hay otro lugar en el mundo donde los jóvenes, de tan diversos orígenes, entran al ejército y salen tan cercanos como hermanos y hermanas. Sesenta y tres años después del establecimiento del estado, las FDI siguen siendo el crisol de Israel, donde todos los sectores se encuentran, conectan y reciben igualdad de oportunidades.

8. Decorado – Nieve en el Monte Hermon, un desierto en el Negev y, en el centro del país, montañas, mar y llanuras. Tantos tipos diferentes de paisajes, todo dentro de las dos horas en automóvil. ¿Cuántos otros países ofrecen todo el mundo en la punta de sus dedos?

9. Jerusalem – Sí, soy parcial. Yo nací en esta ciudad, me crié en ella y he vivido allí toda mi vida. El carácter de Jerusalem, los callejones y los olores – la convierten en la ciudad más impresionante, y nadie me puede convencer de lo contrario.

10. El Estado de Israel – Es nuestra israelidad. Es nuestro constante conflicto de tradiciones, comidas, culturas y costumbres.

Somos fuertes pero morales, orgullosos de nuestra imagen, a pesar de que no siempre sabemos cómo definirla. Nos quejamos del estado, pero siempre estamos dispuestos a defenderlo sin temor.

Israel es el hogar de todos y cada uno de nosotros, y el hogar colectivo de todos nosotros.

La autora es presidente de la facción Kadima en la Knesset.