JOSÉ KAMINER TAUBER

Lag Ba’omer (Hebreo: ל”ג בעומר “trigesimotercer día de Omer”) es la festividad que se festeja entre Pésaj y Shavuot. Lag Ba’omer cae el 18 de Iyar y el día 33 de la cuenta del Omer, cuenta que se realiza de siete semanas entre Pesaj y Shavuot.

Este año, se celebrará el 22 de mayo.

El Omer era una medida de cebada que se ofrendaba en el Templo de Jerusalén, el segundo día de Pesaj, dando comienzo a la cosecha en toda la tierra de Israel. Este día, el pueblo judío traía las primicias de las cosechas al Templo como ofrenda; en este día se recordaba la entrega de los Diez Mandamientos en el Monte Sinaí.

De acuerdo con la tradición judía, la tristeza y el pesar que son consideradas en la Cuenta del Omer son interrumpidos en este día. Hay dos bases para este mandamiento: la primera es que en este día cesó la peste que había brotado entre los discípulos del Rabí Akiva, y la segunda es que en esta fecha se conmemora el aniversario del fallecimiento del Rabí Shimon bar Yojai que pide a sus alumnos que este día se convierta en una festividad y día de alegría.

En el siglo II en Lag Ba’omer, fallece Rabí Simón Bar Yojai (Rashbi) el alumno prodigo de Rabí Akiva, célebre autor del Zohar (resplandor) que es un libro que se convirtió en una luz brillante para la corriente cabalística.

Por generaciones se festeja este día saliendo a los bosques con arcos y flechas haciendo grandes fogatas. Esta costumbre se origina debido a que en la época del dominio romano sobre Israel se prohibía el estudio de la Torá, por ello los estudiantes salían al bosque con arcos y flechas para evitar que la guardia romana se diera cuenta que se dirigían a estudiar Torá y pensaran que los estudiantes iban a cazar.
En Israel,actualmente, se acostumbra visitar la tumba de Rabí Simón bar Yojai en la ciudad de Merón, en la Galilea, al norte de Israel. Miles de personas peregrinan en este día convirtiendo la ciudad en una gran fiesta llamada Hilula.

Entre los rituales o prácticas, los judíos ortodoxos realizan una peregrinación al Monte Merón, donde la tradición indica que está la tumba del rabino Bar Yojai. Saltan, rezan, cantan. Además de armar una gran fogata, aprovechan esta ocasión festiva para cortar por primera vez el pelo de los niños (antes, se lo deja crecer por tres años). Pero no se le cortan los peyes, que son los rulos que la rama mística judía atribuye un poder especial (de ahí la prohibición de rasurarlos y cortarlos).

Ya que estamos en Lag Ba’omer dicen los Cabalistas que cada semana es liderada por una Sefirá.
Primera semana: Jessed ( misericordia)
Segunda: Guevurá (disciplina)
Tercera: Tiferet (belleza)
Cuarta: Netzaj(persistencia)
Quinta: Hod (majestuosidad)
Sexta: Yesod (fundación)
Séptima: Maljut (reinado)

Lo mismo cada día de la semana tiene una Sefirá en el mismo orden contando desde el primer día del Omer.