En Siria, pedir democracia es ser delincuente

 

BENJAMÍN LAUREANO LUNA*

Al hablar hoy en la Universidad de Damasco, el dictador Bashar Al Assad, dijo con desprecio, que los manifestantes que protestan son delincuentes, islamistas radicales, participando además grupos armados, lo que motivó inmediatamente una reacción siria de repudio en las ciudades de Alepo, Hama, en las localidades de Rif en Damasco y en la Provincia de Idleb.

Horas antes del discurso en la Universidad de Damasco, Ersat Hurmuzulo, asesor del Presidente de Turquía, País muy cercano al Gobierno Sirio por su intenso comercio, previno que Assad debe hacer realidad sus prometidas reformas, que exigen los manifestantes, antes de que el caso sea discutido en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, en donde podría emitirse una resolución similar a la adoptada en el caso de Libia. El asesor turco habló ante la televisión Al Arabiya, de Dubai, tratando de influir para que Assad modificara su discurso y enfrentase la realidad.

Quienes exigen reformas democráticas y la vigencia de los Derechos Humanos, no son delincuentes.

Assad impone su poder mediante una minoría aluí, en perjuicio de la mayoría sunita. En todo caso el “gobierno” es el extremista.

Un grupo de militares sirios se rebeló en contra de la dictadura y se opuso a seguir asesinando a los ciudadanos sirios, que protestan exigiendo democracia.

Estos militares rebeldes son calificados por Assad como grupos armados.

Assad dice que está funcionando una conspiración internacional contra Siria.

El movimiento de protesta no es contra Siria, sino en contra de la dictadura.

Por otro lado el Frente Internacional de Derechos Humanos recuerda que compete a toda la humanidad, según la Carta de las Naciones Unidas, la vigencia, respeto y defensa de los Derechos Humanos.

*Presidente, Frente Internacional de Derechos Humanos

 

 

 

Benjamín Laureano: En 1951 fundó el Frente Mexicano Pro Derechos Humanos que se ha desarrollado en todas las Entidades Federativas de México a nivel Estatal, Municipal, Ejidal, Sindical y en Poblaciones Indígenas. Participa en la armonización del Derecho Internacional con el Derecho Interno, para que los Derechos Humanos figuren, tanto en la Constitución como en las leyes. En 1991 practicó por primera vez en México la Observación Electoral. En 1993 se reformó el Código Electoral para oficializar la práctica de la Observación Electoral. Ha asistido a reuniones internacionales sobre esta materia. Se opone a que se eleve al poder a pandillas comprometidas con intereses transnacionales en perjuicio de los Pueblos. Se ha convertido en un experto en el Derecho Internacional de los Derechos Humanos. De 1951 a 2006 nunca ha recibido apoyo financiero de ninguna fuente. Pero a los 80 años de edad ya lo requiere.