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El Ejército de Israel ha comenzado a desmantelar partes del muro que separa Cisjordania de los territorios israelíes a su paso por la localidad de Bilin, en cumplimiento de una orden judicial dictada hace tres años por la Justicia hebrea.
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“Estamos en los preparativos avanzados para retirar la vieja valla, así que algunos elementos van a ser retirados”, ha precisado Peter Lerner, portavoz del Mando Central. La sentencia de 2008 determinó que algunas partes del muro fueron construidos ilegalmente sobre suelo palestino.
“Negociamos con aquellos que recurrieron al alto tribunal, nos sentamos con ellos y básicamente trazamos el nuevo diseño de la valla de seguridad”, prosigue Lerner.
En los últimos seis años Bilin ha sido escenario de protestas contra el muro, que han atraído a activistas palestinos y extranjeros. Cientos de personas han resultado heridas o algunas incluso han fallecido en las múltiples concentraciones.
Michael Sfard, abogado de los vecinos del pueblo, precisa que, en virtud del mandato del tribunal, se recuperarán en torno a 80 hectáreas, menos de la mitad de las que se habían perdido.
“No creo que pueda conseguirse más de lo que tenemos en los tribunales israelíes. Tenemos más del máximo de lo que el tribunal israelí quiere dar a los palestinos, porque el resto de la tierra ha sido abandonada por seguridad”, añade, en declaraciones recogidas por la CNN.
La Corte Internacional de Justicia emitió en 2004 un fallo no vinculante en el que denunciaba que la construcción del muro violaba la legislación internacional. Por el momento se han construido 400 kilómetros, y la construcción de los 700 restantes ha sufrido retrasos a consecuencia de la falta de presupuesto y las denuncias judiciales.
