ENRIQUE RIVERA

21 de julio-Las relaciones diplomáticas son un buen indicador del nivel de interacción y acercamiento entre dos naciones. Sin embargo, la parte medular, que marcará en definitiva el rumbo y la profundidad de éstas se encuentra en el intercambio comercial, cultural, tecnológico y educativo que alcancen.

En ese sentido, las relaciones México-Israel, desde mi punto de vista y desde México, se encuentran este momento “viento en popa . Hemos tenido la oportunidad de disfrutar el arte y la cultura de Israel en diversas manifestaciones y el comercio es una de las áreas de éxito entre ambos países, a pesar de la distancia.

Es así como ayer, asistimos a la despedida de Liat Shaham, la Agregada Comercial de la Embajada de Israel en México, quien afirmó con mucha convicción (y con sinceridad, agregaría yo) que “todo lo que se hizo fue importante, a fin de elevar las relaciones y el volumen del intercambio” (ver la entrevista exclusiva).

Así mismo, el Presidente de la Cámara México-Israel de Comercio e Industria, Lic. Fabián Yáñez,nos devolvió a la realidad del país al señalar la parte más agreste de los negocios, no tanto por los conflictos y dificultades inherentes a las negociaciones, si no y, especialmente, por la corrupción que lamentablemente se da en este medio. Por ello –señaló- la aparición en esos momentos del Agregado (en este caso Agregada) Comercial de la Embajada, es poco menos que una bendición.

Al término de sus palabras, Yañez, acompañado de Ródica Radian Gordon, Embajadora de Israel en México, entregaron un reconocimiento a la funcionaria, alabando su labor y entrega. El público asistente aplaudió con sinceridad a esta joven (y bella) funcionaria israelí.