HADASSAH

“En estudios preclínicos”, comenta el Prof. Rafael Gorodetsky, jefe del Laboratorio de Biotecnología y Radiobiología en el Instituto Sharett de Oncología en el Centro Médico Universitario Hadassah, “descubrimos que las células provenientes de la placenta tienen potencialmente la capacidad de incrementar el rango de sobrevivencia de animales después de estar expuestos a dosis letales de radiación total del cuerpo.”

Estas células de la placenta (PLX) desarrolladas por Pluristem Therapeutics Inc., tratan complicaciones que ponen en peligro la vida, asociadas con el Síndrome de Radiación Aguda (SRA).

Durante estos estudios, se inyectó células PLX o placebo de forma intravenosa a los animales, al día siguiente de haber sido expuestos a dosis letales de radiación. Nueve días después del tratamiento con células PLX, analizaron la médula ósea y el bazo del animal para buscar señales de tejido hematopoyético (que forma sangre).

El día 23, se examinaron las muestras de médula y de sangre de los animales que habían sobrevivido. La sobrevivencia y los cambios de peso corporal también fueron monitoreados. Los investigadores descubrieron en los animales tratados con células PLX:
• un incremento de la tasa de sobrevivencia de hasta cuatro veces acompañado de una recuperación equivalente de peso
• un aumento en la cuenta de células rojas en los días 21 a 23
• un número elevado de colonias hematopoyéticas el día 9

En los próximos meses, el Prof. Gorodetsky y su equipo se concentrarán en entender mejor el mecanismo de acción de las células PLX como tratamiento “disponible” posterior a la radiación que podría ser potencialmente utilizado para tratar a pacientes con SRA (Síndrome de Radiación Aguda).

“Mientras que nuestros experimentos con células PLX para tratar la exposición a la radiación están en curso y evolucionando, esta información inicial es muy estimulante,” dice Zami Aberman, Presidente y Director Ejecutivo de Pluristem.

“Las células PLX como único tratamiento puede mejorar la sobrevivencia de individuos radiados letalmente. Por otro lado, nuestros trabajos anteriores indican que las células PLX pueden mejorar el injerto de células madre hematopoyéticas en el cordón sanguíneo, por lo que podemos ofrecer un enfoque multifacético para reducir y tratar la destrucción de la médula ósea que se produce después de la exposición a altas dosis de radiación ionizante. Las células PLX acumuladas pueden administrarse plenamente y como terapia de transición para proteger la médula ósea. ”