DIARIODENAVARRA.ES

 

La Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Navy Pillay, pidió al Consejo de Seguridad del organismo que refiera el asunto sin dilación a la Corte Penal Internacional.

La Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Navy Pillay, informó este martes de que son más de 5.000 los muertos por la represión en Siria, entre ellos más de 300 menores, y pidió al Consejo de Seguridad del organismo que refiera el asunto sin dilación a la Corte Penal Internacional (CPI).

“El número de muertos en Siria supera los 5.000 y entre ellos hay más de 300 niños fallecidos. Ocurren torturas y en los centros de detención hay un elevadísimo número de desplazados y miles de detenidos”, dijo ante la prensa Pillay tras reunirse a puerta cerrada con los miembros del Consejo de Seguridad.

La Alta Comisionada, como ya hiciera el pasado agosto, pidió a los miembros del máximo órgano internacional de seguridad que, ante las pruebas presentadas, soliciten a la Fiscalía de la Corte Penal Internacional (CPI) que estudie las denuncias de violaciones de los derechos humanos que se cometen en el país árabe.

“Basándome en las pruebas de la naturaleza sistemática y extendida de los asesinatos, las detenciones y los actos de tortura, creo que todos ellos constituyen crímenes contra la humanidad, por lo que he recomendado que se refiera el asunto a la Corte Penal Internacional”, indicó Pillay.

“Todos los miembros del Consejo convinieron en que este nivel de violencia tiene que detenerse“, añadió la Alta Comisionada, que también sugirió al Consejo de Seguridad que trate de enviar al país árabe un misión de investigación bajo su mandato, según indicaron fuentes diplomáticas.

El informe que ofreció Pillay este lunes, celebrado a instancias de Francia y sus socios en el Consejo y al que inicialmente se habían opuesto Rusia y China, fue descrito por varios diplomáticos occidentales como “el más horrible” recibido por el máximo órgano de decisión de la ONU “en al menos dos años”.

“Ha sido el informe más espantoso que hemos recibido en el Consejo al menos en dos años. Rinde cuenta de la violación sistemática de los derechos humanos y son las autoridades sirias las responsables de esta situación, ya que ordenan a los soldados matar y torturar”, dijo el embajador francés ante la ONU, Gérard Araud.

Ante esa situación, Araud señaló que Francia y otros países consideran “escandaloso el silencio del Consejo de Seguridad” sobre el asunto sirio “ante la oposición de ciertos miembros”, en clara referencia a Rusia y China, que vetaron una resolución contra Damasco el pasado octubre.

“El Consejo de Seguridad es el responsable moral de la situación que vive Siria en estos momentos”, añadió el diplomático, que compareció ante la prensa junto a los embajadores del resto de países de la Unión Europea (UE) que se sientan en el Consejo (Reino Unido, Alemania y Portugal).

El embajador británico ante la ONU, Mark Lyall Grant, llamó también la atención sobre la necesidad de acción en el Consejo de Seguridad para detener “los abusos contra la población” que lleva a cabo el Gobierno del presidente Bachar al Asad “mientras la situación sigue empeorando” sobre el terreno.

“El informe de Pillay pone de manifiesto la urgencia que presenta el momento actual. No hay duda: los días de Asad en el poder están contados, pero la pregunta es cuántos más sirios deben morir o ser torturados para que Al Asad deje el poder“, señaló en un comunicado la embajadora estadounidense ante la ONU, Susan Rice.

La Alta Comisionada tuvo también que informar al Consejo de Seguridad sobre la situación de los derechos humanos en Gaza a petición de Rusia y China, después de que ambas naciones se hubieran opuesto a la presencia de Pillay en el Consejo de Seguridad. El embajador británico admitió sin tapujos que el hecho de que Pillay tuviera que informar sobre Palestina respondió “a una clara maniobra de esos países que no querían escuchar lo que la Alta Comisionada tenía que decir de Siria” y recordó que, hasta ahora, no había habido ninguna petición para que se informara de la situación de los palestinos en el Consejo.

Pillay explicó a la salida de su reunión que describió “el disparo indiscriminado” de armas hacia Gaza, con numerosas muertes de civiles, y también “el lanzamiento indiscriminado de cohetes desde Gaza” contra Israel. También señaló su preocupación sobre la actividad de los asentamientos israelíes en los territorios palestinos ocupados y sobre el bloqueo que sufre Gaza, que causa “gran sufrimiento” a la población civil.

Enlace Judío te invita a que dejes tu comentario sobre la noticia.