COMUNIDAD JUDÌA DEL PRINCIPADO DE ASTURIAS

Muchas veces aludimos a la llamada “sabiduría popular” como base de nuestro conocimiento y además utilizamos frases hechas y refranes populares para explicar situaciones actuales, comportamientos y problemas cotidianos para su mejor comprensión. La utilización del refranero es costumbre habitual para reforzar conceptos o simplemente acercarnos a los mismos.

¿Pero, alguna vez nos paramos a pensar en la “carga oculta” que llevan?.
En este trabajo queremos poner de manifiesto el sustrato antisemita que el refranero popular español trasmite y que de alguna manera nos ha condicionando, seguramente de manera inconsciente, y que ha terminado formando parte de esa llamada “cultura popular”.

Recopilando diferentes definiciones de antisemitismo, recogemos a continuación la del autor Gustavo Daniel Perednik, de su libro “La Judeofobia (Cómo y cuándo nace, dónde y por qué pervive)”[1].

El profesor Perednik nos define la judeofobia, como un ODIO con unas características de singularidad y con las peculiaridades siguientes:

Antiguo.- Pues dura más de dos milenios.
Generalizado.- Ya que de todos los países han sido expulsados los judíos alguna vez.
Permanente.- Pues continúa, por décadas, incluso cuando los judíos ya han partido del lugar.
Profundo.- Los estereotipos mentales están profundamente arraigados.
Obsesivo.- Hay que quebrar al judío de una manera total.
Peligroso.- Debido a su profundidad, esta hostilidad desborda toda discriminación y estalla en violencia física.
Quimérico.- Este odio desvirtúa la realidad.
Fácil.- Pues todos los grupos xenófobos terminan por atacar al judío.

Teniendo en cuenta lo anterior vamos a recopilar una serie de refranes, dichos y frases hechas que se han utilizado cotidianamente y que están en la memoria colectiva española; para ello recurrimos al libro de Gonzalo Álvarez Chillida “El antisemitismo en la historia de España. (La imagen del judío 1812-2002)”[2], en el que se recogen una buena colección de dichos y refranes que han pasado de una manera clara a la cultura ancestral española.
Junto a algunos que el autor anterior aporta, añadiremos otros hallados en diferentes textos y que agrupamos temáticamente:

Incitación a la desconfianza “ Fíeme del judío y écheme al río”.
“ Fiar del judío, gran desvarío”
“ No fíes del judío, ni de su hijo ni de su vecino”.
“Con judío chato ningún trato y aunque sea narigón ninguna conversación”.
“Guárdeme el Dio de quién me fió, dice el judío”.
“Al judío y al puerco no los metas en tu huerto”.

Incitación a la violencia

“Judío triste, vete por donde viniste”.
“Al judío bejarano, con el palo y no con la mano”.
“Judío ni puerco, no mates en tu huerto”.
“A quién sea judío que lo quemen”.
“Dámelo judío y dártelo quemado”.

La consabida referencia a la usura (aunque no aparezca la palabra)

“El judío que ni pelea ni presta, es cosa molesta”.
“Duerma don Sem Tob, más su dinero no”.
“El buen judío de la paja hace oro”.
“Ni judío pobre ni liebre lerda”.

¡Cómo no…ladrón!
“El gato y el judío, a cuanto ven dicen mío”.
“La labor de la judía, afanar de noche y folgar de día”.

Consideración de vagos
“Judíos y gitanos no son para el trabajo”.
“Judío y trabajar no pueden concordar”.
Comparaciones con los estereotipos negativos atribuidos a las mujeres
“ Judío o mujer que jura, malicia segura”.
“ Judío y dona (mujer) y hombre con corona jamás perdona”.

La idea de “escupir” como característica judía

Según recoge, Álvarez Chillida en su libro antes mencionado, el académico Antonio Muñoz Molina recuerda haber oído la frase “judío que escupiste al Señor”[3].
Igualmente recuperamos de nuestros recuerdos de infancia la frase:

“Escupir es de judíos”.

Álvarez Chillida señala que en Estella (Navarra) se decía:

“Escupe judío
escupe a la mar
escupe la sangre
que te han de matar”[4].

Pero…tampoco se salvan los conversos

“Está bien parecer colgado, como tocino en casa de marrano”.
“Nunca vuestro abuelo Gómez pagó diezmo de lechones”.
“No te fíes del judío, converso, ni de su hijo ni de su nieto”.
“No digas judío “ax”que deshonras tu linax” (la x pronunciada como j).

Investigando en internet, aparece una entrada titulada “Refranes y proverbios de España” que toman como figura central al Marqués de Santillana (1398-1458), y que recoge los siguientes dichos:

“Judío, toma buen sábado y no quiere gallina hurtada”, refrán que el propio marqués intenta explicar de la siguiente manera: “No basta excusar un pecado, si por otro está el hombre condenado”. Como vemos, da más importancia al hecho “terrible” de ser judío que a la honradez de la persona.