EXCELSIOR

1 de febrero.- Según dio a conocer el Gobierno egipcio, 74 personas han muerto y 188 resultaron heridas por los enfrentamientos entre las hinchadas de dos equipos de futbol egipcios en Port Said (noreste).

En un comunicado, el Ministerio del Interior explicó que hasta el momento 47 personas han sido detenidas por los enfrentamientos entre los hinchas del equipo local, el Al Masry, y los del Al Ahly, en un juego que ganó el primero 3-1.

Autoridades explicaron que la mayoría de fallecidos perdieron la vida por fracturas en el rostro y hemorragias internas, con un gran número de ingresados por caídas desde los graderíos del estadio.

Según agregaron fuentes policiales egipcias, la situación de la seguridad fue controlada por el ejército y la policía.

El jefe de la Junta Militar egipcia, Mohamed Husein Tantaui, ordenó que dos helicópteros del ejército se desplacen a Port Said (noreste) para evacuar a El Cairo al equipo del Al Ahli.

La llegada de los helicópteros responde a una petición expresa del club cairota, según fuentes próximas al equipo.

El ejército ya comenzó a sacar de la ciudad a los aficionados del Al Ahli en autobuses protegidos por vehículos blindados de las fuerzas armadas.

Sin embargo, según Mena, los locales comerciales han cerrado sus puertas en Port Said tras varios actos de vandalismo, mientras los servicios de sanidad comenzaron a pedir donaciones de sangre entre los vecinos de la localidad.

El presidente de la cámara baja del Parlamento egipcio, Saad al Katani, convocó de urgencia una sesión de la institución legislativa para debatir mañana los sucesos de Port Said.

La televisión estatal egipcia añadió que la Fiscalía ordenó la investigación de los disturbios en este partido de la competición egipcia.

Las repercusiones de los enfrentamientos saltaron de inmediato a otros estadios de Egipto, como sucedió en el choque entre el Zamalek cairota y el Ismaily, que fue suspendido al final de la primera parte por el árbitro.

Los “ultras” del Al Ahli, más conocidos como los “Diablos Rojos”, tienen fama de ser muy radicales y se han enfrentado con frecuencia a las fuerzas de seguridad egipcias en las protestas que han sacudido en los últimos meses la plaza Tahrir de El Cairo.

Sin embargo, según dijeron testigos presenciales, fueron los hinchas del Al Masri quienes provocaron el enfrentamiento, al invadir el terreno de juego tras cada gol de su equipo (que se impuso por 3 a 1) y hacerlo de nuevo cuando acabó el partido.

“Es un caos completo”

El portugués Manuel José, entrenador del Al Ahli, de El Cairo, constató a los medios lusos el “caos completo” que se vivió en los enfrentamientos producidos entre la hinchada de su club y la del Al Masri.

“Nuestros aficionados llegaron a entrar en nuestra cabina. Ya murieron cerca de 36 personas. Mientras, prendieron fuego. De nuestro equipo están todos bien. Yo no logré regresar a la cabina. La culpa es de los soldados, había decenas de ellos y de policías también. Desaparecieron todos, está el caos completo”, declaró a la televisión lusa Sic Noticias.

Manuel José, de 65 años, aseveró que le propinaron “puntapiés, puñetazos” y expuso que le “metieron en una sala y nunca más consiguió volver a la cabina”.

El técnico comentó que se encuentra “bien” y señaló que todo comenzó con los enfrentamientos entre las dos aficiones.

“Ahora voy a tener que repensar mi vida. No hay condiciones”, refirió el entrenador portugués, que dirige desde el pasado año al Al Ahli, club en el que ya trabajó entre 2001 y 2002 y 2003 y 2009.

Acusación de los Hermanos Musulmanes

El Partido Libertad y Justicia (PLJ), brazo político de los Hermanos Musulmanes, acusó hoy a los partidarios del antiguo régimen de Hosni Mubarak de los disturbios que han causado al menos 73 muertos en Port Said (noreste).

“Los acontecimientos de Port Said están orquestados y son un mensaje de los remanentes del antiguo régimen”, denunció el vicepresidente del PLJ, Esam al Arian, en un comunicado difundido en la página web del movimiento islamista.

Al Arian, cuyo partido ocupa casi la mitad de los escaños de la nueva Cámara Baja, aseguró que “hay partes que quieren que continúe el derramamiento de sangre”.

El dirigente islamista relacionó los incidentes que estallaron entre aficionados de dos equipos de futbol en Port Said con los ocurridos ayer durante una manifestación frente al Parlamento, en la que se enfrentaron manifestantes contra la Junta Militar y simpatizantes de este grupo.

El movimiento Hermanos Musulmanes también emitió un comunicado en el que se expresó en la misma línea y relacionó asimismo la “masacre de Port Said” con los recientes asaltos a varios bancos esta semana y los disturbios en la manifestación de la víspera.

Dicen que ultras querían linchar a jugadores

“Los ultras del Al Masry saltaron al campo a linchar a los jugadores del Al Ahly”, relató a Efe el joven Hosam Mohamed Mustafa, testigo de los graves disturbios que causaron la muerte de al menos 73 personas en Port Said (noreste de Egipto), tras el final del partido que enfrentaba a esos equipos.

Los hinchas del Al Masry, el equipo local, amenazaron de muerte desde el comienzo del partido a los seguidores y jugadores del rival Al Ahly y al final del encuentro se lanzaron al campo para perseguirlos, explicó.

Según Mustafa, los futbolistas más hostigados fueron las principales estrellas del equipo cairota, y entre ellos citó al portero Sherif Ekramy y el centrocampista Mohamed Abutrika, un auténtico ídolo del futbol africano.

Según este espectador, las fuerzas de seguridad no impidieron a los miles de ‘fans’” del Al Masry, l equipo local, invadir el campo al fin del encuentro.

Pese a que el Al Masry ganó 3-1, los hinchas “atacaron como una avalancha a los futbolistas e irrumpieron en la gradas reservadas a los seguidores de Al Ahli”, indicó Mustafa, que no es seguidor de ninguno de los dos equipos.

Aunque al inicio del partido el ambiente era “bueno”, cada gol de Al Masry fue celebrado con invasiones del terreno de juego y las amenazas contra los rivales estallaron pronto con gritos de “Os vamos a matar” y “No os dejaremos volver a salvo a vuestra casa”.

“Dentro del estadio los ultras del Al Masri comenzaron a lanzar bengalas contra sus oponentes y desde el exterior piedras”, señaló este testigo.

Los disturbios se extendieron por la ciudad, donde, según el joven, fueron incendiados vehículos y los hinchas causaron destrozos en negocios privados.

Torneo suspendido

La Federación Egipcia de Futbol decidió hoy suspender el campeonato de la primera división en este país por un período indefinido por los sucesos en la ciudad de Port Said, que estallaron al final del partido entre el Al Ahly y el Al Masry.

En declaraciones telefónicas a la cadena de televisión del club Al Ahly, el presidente de la Federación, Samir Zaher, anunció la cancelación y la apertura de “una investigación urgente de los acontecimientos, por un comité de investigación para mostrar la verdad al público”.