AJN.El presidente de Irán, Mahmoud Ahmadinejad, se presentó en el parlamento para enfrentarse a un interrogatorio sin precedentes por legisladores insatisfechos con su desempeño en el poder, según informaron los medios iraníes hoy.

Ahmadinejad fue acompañado por un número de ministros del gabinete a una sesión especial, según dijo la agencia de noticias estatal IRNA, luego de haber sido convocado el mes pasado por un grupo de parlamentarios hostiles. Es el primer presidente que es llamado por el parlamento en la historia de la República Islámica.

El presidente ha sido ampliamente acusado de gastar recursos en folletos gubernamentales y los críticos dicen que su retirada de subsidios a la comida y al combustible han llevado a una profunda inflación.

Las facciones tradicionalistas han estado intentando convocar al presidente por meses debido al manejo económico del gobierno y a la desafiante restitución del ministro de inteligencia, el cual fue echado por Ahmadnejad, a través del líder supremo Ayatollah Khamenei.

Respondiendo a un cuestionamiento sobre su ausencia, el presidente dijo, según IRNA: “Esta es una de esas cosas. Ahmadinejad quedándose en casa y descansando. Algunos de mis amigos me han dicho que descanse. En este gobierno el trabajo nunca ha parado ni por un día”.

El presidente minimizó la importancia de la sesión y dijo que era el derecho del parlamento y que no era algo extraordinario. “Estaba listo para responder preguntas antes de la elección. Pero pensé que podría tener un impacto en los resultados y luego sería culpado. Es más fácil echarme la culpa a mi”, dijo, en referencia a las recientes elecciones parlamentarias.

También fue acusado de estropear la financiación de la extensión del sistema de metros de Teherán y fue interrogado sobre la veracidad de las cifras gubernamentales que muestran que se crearon 1.6 millones de puestos de trabajo en el 2009 y el 2010.