YARED ARAM MULIER ROJAS PARA ENLACE JUDÍO

Mucho se ha dicho sobre el señor Günter Grass, a partir del día 4 de abril después de que publicó su artículo “Lo que hay que decir”, en el que trata de poner a Irán en el lugar de victima y a Israel como el opresor, y tratando de vender al mundo su opinión sobre el conflicto político de los últimos meses. Debimos responder como sociedad y el gobierno dejarlo en ese nivel.

Lo que empezó como la declaración tendenciosa de un individuo con un cierto status literario para llamar la atención sobre un punto y mostrar su inconformidad que podría decir histórica con una sociedad, se ha salido de las manos y podemos decir que le hemos dejado conseguir su objetivo. Con declaraciones desde todos los frentes posibles, la Comunidad Judía Alemana, El Primer Ministro Benjamín Netanyahu, el Ministro de Interior de Israel declarando a Gunter como persona no grata y negándole la entrada a el país y El estado Alemán respondiendo.

Debemos tener en cuenta que el asunto político más importante de esta semana es la demanda de Israel a Irán sobre la amenaza que representa su proyecto nuclear. Y que tendrá a como protagonistas a Irán y los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU el Grupo 5+1 (EE UU, Gran Bretaña, Francia, China y Rusia + Alemania) y que se concertara el día 13 de abril con Estambul como posible sede.

Esto solo ha desgastado la relación Alemania-Israel dividiendo a la sociedad alemán y judía, aun más de lo que ya se encontraba por el sensible tema del proyecto nuclear iraní en un momento en el que la relación entre ambas naciones se ha fortalecido por la venta de Alemania a Israel de submarinos para reforzar la fuerza naval Israelí.

Hoy Irán a vuelta inclinar la balanza en su contra al cancelar sus negociaciones de petróleo con Alemania, recordando que ya cancelo el suministro a Francia y Gran Bretaña. Con lo que pone en duda a algunos de sus seguidores y se complica más el panorama para una resolución que le sea favorable.