Jerusalén, 13 jun.- El supervisor del Estado israelí, Mija Lindenstrauss, presentará hoy su informe sobre el funcionamiento del Gobierno y del Ejército en el asalto a la Flotilla de la Libertad hace dos años, en el que, según medios locales, revelará graves fallos por parte del primer ministro Benjamín Netanyahu.

El documento, de unas 150 páginas, dice que el primer ministro no convocó un debate interno apropiado con sus ministros y asesores antes de tomar la decisión de asaltar la flotilla que se dirigía a Gaza con ayuda humanitaria y cientos de activistas pro-palestinos a bordo, informa el diario Yediot Aharonot.

En el asalto murieron nueve activistas turcos y decenas resultaron heridos, en una operación militar en la que se acusó a los organismos de inteligencia de no haber contado con la suficiente información para saber que los soldados de elite que abordaron el barco Mavi Marmara se encontrarían con resistencia.

Lindenstrauss, dice la fuente, criticará al primer ministro por el proceso de toma de decisiones que precedió a la operación y por no haberse asesorado en los foros políticos pertinentes en materia de seguridad y exteriores.

Se trata de una acusación similar a la que hará contra el ministro de Defensa, Ehud Barak, que torpedeó la posibilidad de que altos mandos militares presentaran sus planes al Gobierno o expusieran alternativas al asalto.

La Flotilla, que trataba de romper tres años de bloqueo israelí a la franja de Gaza, fue abordada por comandos israelíes el 31 de mayo de 2010 en aguas internacionales, y sus consecuencias causaron un grave daño a la imagen internacional de este país y una grave crisis en sus relaciones con Turquía.

El supervisor del Estado dedica uno de los capítulos de su informe al fracaso de la campaña diplomática e informativa que el Gobierno israelí lanzó para frenar las críticas, y recomendará, siempre según el diario, reorganizar todo el mecanismo de crisis para estos casos.

El de Lindenstrauss, que abrió expediente sobre el caso a pesar de la oposición del Gobierno, será el tercer informe interno israelí sobre la Flotilla, aunque no se espera que tenga ramificaciones judiciales ni políticas como sí tuvieron otros de su oficina en el pasado.