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Mujeres y niñas iraquíes se enfrentan a un aumento en las pruebas de virginidad ordenadas por el tribunal con el fin de demostrar que eran vírgenes hasta el matrimonio- prueba que, aún cuando la pasan, lleva su carga de vergüenza. Los médicos del Instituto Médico Legal de Bagdad que llevan a cabo las pruebas acerca de la presencia del himen en las mujeres confirmaron el aumento en el procedimiento en entrevistas con la agencia France Presse.
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Seguir siendo una virgen hasta el matrimonio puede ser un problema de vida o muerte para las mujeres en el Medio Oriente, donde se considera que deshonrar a la familia- al tener relaciones sexuales antes del matrimonio- es merecedor de la pena capital.
AFP dice que pruebas de virginidad se realizan diariamente en el Instituto Médico Legal de Bagdad, en una pequeña habitación sin ventanas, con paredes de azulejo azul y una mesa de exploración de color negro,con estribos para las piernas.
“Recibimos la mayoría de los casos después del primer día del matrimonio”, dijo el doctor al-Munjid Rezali. “El marido dice que su nueva novia no es virgen, y la familia la trae aquí, con la aprobación del tribunal, para examinarla”, dijo Rezali. “Estas pruebas son cada vez más comunes.”
“Se cree que durante la primera relación sexual del matrimonio, debe de haber sangre; que si no hay sangre, no hay virginidad”, dijo el Dr.Sami Dawud, un médico forense que ha participado en las pruebas, a la AFP. Esta creencia, dijo, indica que la educación sexual y el conocimiento popular acerca del tema son “muy pobres”.
Sin embargo, dijo, mientras las mujeres eran asesinadas antaño en las calles, la gente ahora recurre a los tribunales y al procedimiento de las pruebas de virginidad .
La prueba, que tarda entre 15 y 30 minutos, las llevan a cabo tres médicos, y los resultados están certificados por otros dos, dijo Dawud.
