ENLACE JUDÍO
“Los espacios se invaden, se toman por la fuerza, se someten, se ocupan sin pedir permiso. No es cosa de autoridad, sino de esencia. Hay lugares que piden ser conquistados, se dejan habitar…”.
La casa de Hashomer Hatzaír es una bellísima mansión de estilo colonial en Polanco. El sábado 25 de agosto, rebosaba de jóvenes que llegaron a escuchar música, conocerse, comer un bocado, platicar y ver las distintas interpretaciones del judaísmo que instituciones de la Comunidad plasmaron en los espacios de dicha casa.
Samuel Kelerstein, Michel Figot e Isidoro Hamui conforman Hip, un proyecto que desde el judaísmo promueve y difunde propuestas culturales a través de eventos y experiencias creativas en la Ciudad de México. “Aprovechamos nuestra pertenencia a la comunidad judía como punto de partida, creemos que ésta tiene mucho potencial poco atendido por diversas razones. Buscamos nuevas maneras de atraer a los jóvenes para divertirnos en un ambiente rodeado de cultura y arte”.
Una de estas actividades fue “Casa ocupa”, la cual expresó la pluralidad de un judaísmo mexicano multifacético, donde pudimos ver tanto expresiones de arte como música rock en ladino, clips del Festival Internacional de Cine Judío, una exposición de Hashomer Hatzaír y una recámara de Jóvenes por el Yiddish, completa con posters de Molly Picon.
Destacó la presencia del Grupo Guimel, cuyo principal objetivo es conciliar la identidad judía con la diversidad sexual, y que, además de un espectacular video con testimonios, montó un extraordinario “closet” en uno de los espacios.
Hubo sesiones de meditación y música en vivo. Desde las 10:00 de la mañana hasta las 22:00 horas, imperó un sola consigna : divertirse en un ambiente sano.
Y ni hablar del espectacular lounge, donde se ofreció, incluso, comida a los asistentes.
Felicidades a todos los responsables de un evento extraordinario por su singularidad, el toque bohemio y el respeto a la diversidad del judaísmo mexicano.
