EL MUNDO /

“Hola, me llamo Bar y necesito tu ayuda para hacer realidad mi sueño de grabar una cinta sexual”. Por motivos evidentes, este mensaje de la modelo israelí no ha tardado en dar la vuelta al mundo. “Me refiero a una cinta en la que aparezca yo practicando sexo con algún tío, en muchas posiciones sexuales diferentes, durante al menos unas horas”, continúa Refaeli en un vídeo que, mal interpretado, puede haber sido causa de algún paro cardíaco en cualquier lugar remoto. Pero, para desgracia de muchos, lo cierto es que se trata de un nuevo ‘gag’ del portal Funny or die.

El cómico Will Ferrel, socio fundador de la página, ha vuelto a hacer de las suyas, esta vez con la mujer más ‘sexy’ del año como cómplice. Una ingenua Bar Refaeli que, sentada en lo que podría ser el comedor de su casa, anuncia su nueva campaña en Kickstarter (una popular plataforma para lanzar proyectos creativos en busca de financiación) para poder producir un vídeo de carácter sexual. “Sé lo que estás pensando, ¿quién querría verlo?”, se pregunta. Como respuesta, se disparan los patrocinadores en el contador. Para cuando la modelo ha explicado que necesitará 10.000$ con los que poder “pagar un equipo de calidad que capture mi cuerpo desnudo”, la cifra ya ha sido sobrepasada con creces y los hombres se arremolinan en el jardín blandiendo fajos de billetes.

No hay duda, Bar Refaeli es el mejor de los reclamos, en la ficción y en la vida real, porque la popularidad de este vídeo está creciendo a la misma trepidante velocidad que los dólares en la campaña ficticia. Tampoco hay que restarle mérito al humor de los chicos de ‘Funny or die’ pero la suma de palabras como ‘sexual’ y ‘Bar Refaeli’ en la misma frase tiene bastante que ver con su éxito. A las pruebas nos remitimos. Eva Mendes y su cinta (adhesiva) y las ‘filtraciones’ eróticas del móvil de Charlize Theron son dos de los vídeos de la página web que más repercusión han tenido en las redes sociales. A partir de ahora, y para ahorrarse disgustos, más de uno debería prestar más atención al logo de Funny or die, aunque con él, las risas están aseguradas.