AJN

17 de noviembre 2012- El presidente de Israel, Shimon Peres, aseguró hoy que la operación Pilar Defensivo lanzada por el Ejército israelí contra los grupos terroristas que operan en la Franja de Gaza “no es una guerra sino una defensa justificada de civiles”.

“Este no es el lanzamiento de una guerra, sino una defensa justificada de los civiles y el mundo está con Israel. Los que predican con nosotros acerca de la moralidad deben ofrecer una forma alternativa para detener el lanzamiento de cohetes de Hamas”, reclamó el mandatario en un mensaje enviado a través de su cuenta en la red social Facebook.

Peres realizó estas declaraciones luego de reunirse con el primer ministro Benjamin Netanyahu para analizar los últimos acontecimientos del conflicto que mantienen Israel y Hamas.

“Ningún país estará de acuerdo en que sus niños a vivan en esa situación intolerable. Tengo el mayor respeto por los ciudadanos maravillosos del sur de Israel, no es fácil vivir entre las sirenas y correr a los refugios. Me uno con el Primer Ministro en su petición de que todo el mundo escuche y obedezca las instrucciones del Ejército y los servicios de seguridad”, agregó Peres.

Asimismo, el Presidente indicó que “la operación que está llevando a cabo por el Ejército israelí y los servicios de seguridad es justificada, no podemos abandonar a las mujeres y los niños a la locura de Hamas, que sigue disparando a civiles sin razón”.

“Hamas no tiene ninguna razón para disparar contra la población civil de Israel. He hablado con presidentes de todo el mundo, entre ellos el presidente (Barack) Obama, y nadie duda de la justificación de la operación”, resaltó Peres.

Por su parte, Netanyahu afirmó que Israel seguirá “golpeando duro a Hamas” y “apuntando contra los misiles que están dirigidos hacia el centro y el sur del país”.

“Hamas apunta a nuestros niños a propósito, y posicionan sus cohetes cerca de sus niños también a propósito. Israel seguirá haciendo todo en su poder para evitar que haya víctimas civiles”, dijo Netanyahu.

Tanto el Primer Ministro como el Presidente hablaron con los principales líderes del mundo, incluyendo al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, quien respaldó la operación del Ejército hebreo.