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Alicia Benarroch destacó el papel luchador de las judías en los premios Mem Guimel. Ricardo González puso de ejemplo a Melilla como modelo de convivencia.

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Alicia Benarroch y Ricardo González recibieron ayer los premios Mem Guimel en un acto organizado por esta asociación en el Casino Militar. Estos dos galardonados ofrecieron unas conferencias en la que se destacó Melilla como ejemplo de convivencia. Benarroch habló el papel luchador de la mujer judía melillense y expuso la tesis de que “la ley religiosa ha defendido a la mujer judía más allá de lo que estaba apoyada por las redes sociales que la rodeaban”. González resumió en su ponencia el modelo de paz entre culturas de la ciudad y lo comparó con Jerusalén y con la época medieval de Toledo.

Mem Guimel aseguró que estos dos premiados merecían el galardón por la colaboración desinteresada que han realizado desde los inicios de esta entidad.

Las corrientes conservadoras

La melillense Alicia Benarroch explicó en su charla que la comunidad israelita de Melilla siempre ha tenido en cuenta a la mujer. Así, indicó que en las actas de esta comunidad se puede ver cómo había un gran interés en que las niñas asistieran a la escuela y se formaran para tener un futuro mejor.

Benarroch aseguró que en los últimos años han surgido corrientes conservadoras en la ciudad que deben combatirse. Afirmó que hay cierta involución de la independencia de la mujer judía.

Esta doctora en Ciencias Químicas explicó que se debe “seguir luchando por la integración de la mujer que tiene aspiraciones profesionales y que consiga trabajar, no sólo para buscarse un sustento o para ayudar a la economía familias, sino porque desea ir a más en su profesión”. Apuntó que las corrientes conservadoras están eliminando esas aspiraciones y que se debe intervenir para evitar que vaya a más esta situación.

Benarroch aseguró que no se esperaba recibir este premio y que se sentía muy alagada por haber sido escogida por Mem Guimen para recibir este galardón.

Elena Fernández, componente de esta asociación, leyó un comunicado que había llegado desde Jerusalén para Benarroch en la entrega de este premio. En este escrito se destacaba el carácter luchador de esta melillense y se la felicitaba por este homenaje.

Convivencia espontánea

Ricardo González afirmó que se sentía muy orgulloso de recibir este premio de la manos de Mem Guimel. Destacó que conoció a esta entidad a través de Internet y que también tuvo la oportunidad de conocer a su presidente, Mordejay Guahnich, que le explicó este proyecto con el que empezó a colaborar de forma desinteresada. “Me pareció fascinante dar a conocer la cultura sefardí”, explicó González.

Este abogado madrileño indicó que dar a conocer a otros colectivos la labor de Mem Guimel sirve para ganar y sumar colaboradores y que se tiene en cuenta este proyecto en otras colaboraciones que realiza a nivel nacional, como en el Comité de lucha contra el Antisemitismo, o internacional, a través de Abogados por Israel del Reino Unido.

González ofreció ayer una conferencia titulada ‘Jerusalén-Toledo-Melilla’. En esta charla realizó una comparación entre estas tres ciudades y sus modelos de convivencia entre las tres religiones monoteístas más importantes para España.

Destacó Jerusalén por ser la patria espiritual del mundo judío, al igual que Toledo lo fue para la cristiandad entre los siglos XI y XIII y Melilla por ser el actual modelo de convivencia entre culturas que se puede exportar a otras regiones del mundo.

González indicó que se puede tomar como un modelo ideal la Toledo en la que surgió la Escuela de Traductores para luchar contra los efectos que está provocando la crisis económica. Este conferenciante aseguró que el auge de la extrema derecha, el repunte del antisemitismo y el odio hacia el extranjero y el diferente son algunas de las consecuencias de esta crisis.

“Me parece que el diálogo y la convivencia se hace más necesaria en este escenario, por eso hay que hablar también de Melilla en esta conferencia. Porque es un ejemplo sencillo de la integración diaria y espontánea de todas las culturas que conviven de manera ejemplar”, apuntó González.

Este abogado señaló que Melilla no está exenta de problemas y que la convivencia no es perfecta, pero señaló que al igual que no lo es entre una pareja o un grupo de amigos. “Creo que sólo con respecto, diálogo, dándose a conocer y conociendo se puede solventar estos problemas”, aseguró.

Difusión de la cultura sefardí en España

Mem Guimel nació en 2007 para dar difusión a la cultura judía sefardí. Esta asociación está formada por un grupo de personas de todas las culturas y religiones con inquietudes sobre la comunidad hebrea. La difusión de la cultura sefardí en las sociedades hispanas es uno de los objetivos de esta entidad. Esta asociación creó los premios Mem Guimel para recompensar el trabajo, el compromiso y la trayectoria de personas y entidades que han colaborado de forma desinteresada. Por ello, destacaron el papel en esta entidad de Alicia Benarroch y Ricardo González, ganadores de este año. Además, se aseguró que sin la colaboración del Instituto de las Culturas, este evento no podría haberse realizado, ya que dependen de las ayudas institucionales para sus actividades.