MAY SAMRA PARA ENLACE JUDÍO

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Trending Topic es la columna de una editora que, en el laberinto de las noticias diarias, va detectando ciertas tendencias …

El 19 de marzo, se cumple un año del terrible asesinato de tres niños judíos y el padre de dos de ellos en la escuela Otzar Hatorah (el tesoro de la Torá) en Toulouse, Francia.

Según Guy Milliere, de Menapress.org, el asesino, Mohammed Merah, “actuó como yihadista. Actuó como antisemita… Incluso durante la guerra, ningún colaborador de nazis, que yo sepa, mató a niños en el mismo patio de su escuela”.

Los actos de Mohamed Merah son extremadamente graves y absolutamente viles. Es un hecho, dieron lugar a un resurgimiento de la violencia antisemita en toda Francia y una ola de ataques contra los judíos, marcados por varios hechos importantes. Milliere explica: “Mohamed Merah se convirtió en un héroe en todo lo que se llama hoy los “suburbios del Islam” (ver imagen).

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En uno de los “suburbios del islam”, este graffiti:
“Has sido un orgulloso Caballero del islam…
Has combatido la mierda sionista y los falsos musulmanes…
Falleciste armas en mano…
Te saludo, Mohamed, mi hermano, mi amigo…
¡Descansa en paz!

Los medios de comunicación franceses, prácticamente todos, se deshonraron presentándolo ya sea como un “lobo solitario”, o como un “delincuente urbano” que “resultó mal”. Incluso hoy en día, no se mencionan las redes islámicas en Francia que hicieron que “el hombre del scooter” se convirtiera en asesino y lograra sus crímenes. Sabemos que su familia, con la honrosa excepción de uno de sus miembros, está imbuida de las mismas ideas que infectaron la suya”.

¿Dónde ha sido adoctrinada esta gente? ¿Acaso los servicios de inteligencia no lo saben?¿Por qué callan? ¿Por qué no se actúa en consecuencia?

Ayer, desde España, La Vanguardia reportó que el ministro francés del Interior, Manuel Valls, alertó del antisemitismo que se ha propagado entre grupos de jóvenes de barrios populares de su país, y que deriva en ciertos casos en proyectos terroristas…

“Hay un antisemitismo en esos barrios populares” que “quiere alimentarse del conflicto de Oriente Medio” y que “es el elemento de identidad de algunos grupos” de jóvenes, señaló Valls en una entrevista por televisión.

Advirtió de “la crisis de identidad que viven algunos de esos jóvenes” par quienes “la respuesta no puede ser únicamente policial, sino de toda la sociedad”, lo que incluye también a “las autoridades musulmanas”.

A modo de ejemplo, consideró que hay algunas indicaciones de esas derivas, como cuando un padre ve que su hijo cambia, que se viste de forma particular y empieza a frecuentar mezquitas radicales.

¿Hay mezquitas radicales que incitan al antisemitismo? ¿Si lo sabe el gobierno, por qué no las cierra, en vez de pedir a los padres que se fijen en la vestimenta de sus hijos?

El ministro consideró que “el recuerdo de las víctimas” de Merah “debe seguir para continuar combatiendo la amenaza del terrorismo”.

¿Se va a combatir con “recuerdos?”

En Menapress, Guy Milliere concluye:

“No nos atrevemos, en Francia a denunciar el antisemitismo, si no es en términos vagos y genéricos; esto es simbólico del miedo identificar a los verdaderos culpables. Preferimos, si es posible, incluirlos en una pelea más genérica y vaga contra el “racismo” que se supone viene, por supuesto, sólo de la extrema derecha.”
 
“No nos atrevemos a hablar de los delitos en contra de los judíos, y no mencionamos para nada lo que todos los occidentales deben a los judíos: podría eso suscitar antisemitismo”.
 
“Sólo nos atrevemos a hablar del yihadismo cuando sucede fuera de Francia. Ocultamos la influencia en Francia del islam radical- y no hablamos del antisemitismo musulmán”.
 
“Esto ocurre, por supuesto, en medio de un discurso pernicioso y perverso en contra de Israel, al cual nos unimos a veces porque no debemos “importar” hasta aquí un conflicto que tiene lugar en otra parte”.

Lo “políticamente correcto” es la mejor herramienta de los formadores de terroristas; el no decir las cosas por su nombre – e ignorarlas- nos convierte en hipócritas peligrosos.