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El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) advirtió en un nuevo informe, publicado ayer en Ginebra, que unos dos millones de niños sirios tienen su futuro comprometido por el conflicto armado debido a los desplazamientos masivos de población, a la falta de infraestructuras y a la violencia que los dejará marcados para siempre.

«Las consecuencias de la guerra civil siria, que ya entró en su tercer año, afectará gravemente a toda una generación de infantes que son testigos de la destrucción de su pasado y de su futuro y que corren el riesgo de convertirse en una generación perdida para el país», declaró el director ejecutivo de Unicef, Anthony Lake.

La Organización especializada en la infancia lanza un grito de alarma ya que actualemente sólo el 20% de su petición de fondos de 150 millones de euros ha sido financiada por la comunidad internacional y si la situación no cambia de aquí a finales de Marzo se verá obligada a interrumpir sus operaciones de asistencia médica en Siria.

Según el informe, en la ciudad de Alepo sólo el 6% de los niños asisten a la escuela ya que los centros escolares o bien han sido destruidos o son actualemte utilizados para albelgar a famlias de desplazados internos. En las que pueden funcionar cuentan hasta cien alumnos por clase mientras que en todo el país se calcula que uno de cada cinco colegios ha sido destruido.

Titulado «Dos años en Siria», el informe facilita cifras preocupantes respecto a la situación de la población infantil. Unos 500.000 de niños son refugiados de guerra -el país tiene un millón de refugiados en total- y miles de niños no han sido vacunados contra la polio ni contra el sarampión, carecen de asistencia médica o están expuestos a cualquier forma de explotación.

70.000 muertos

Publicado con motivo del segundo aniversario de la crisis siria, el estudio indica que en las zonas más afectadas por el conflicto el acceso al agua potable se ha reducido en dos tercios lo que ha provocado un aumento considerable de las enfermedades de la piel y respiratorias. «Los niños se enfrentan con grandes peligros: la muerte, la mutilación y la orfandad», explica el informe.

Desde el comienzo de la guerra civil unas 70.000 personas han perdido la vida en Siria. El número de niños que han muerto ha causa de este conflicto no ha sido publicado de manera oficial por las autoridades sirias, afirma Unicef.

Fuente:abc.es