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16 de abril 2013- Los explosivos usados en las mortíferas explosiones en el maratón de Boston estaban contenidos en ollas de presión de seis litros, ocultas en bolsas de lona dejadas en el suelo, reveló una persona familiarizada con la investigación. Una de las ollas contenía fragmentos y bolas metálicas y la otra tenía clavos, dijo la fuente.

Richard Deslauriers, agente especial del FBI, dijo el martes 16 de abril que la investigación aún no tenía pistas, 18 horas después de que dos explosiones estallaran en la meta del Maratón de Boston, matando a tres personas e hiriendo a 176-17 de ellas de gravedad .

Las fuentes antiterroristas de DEBKAfile pueden divulgar, sin embargo, que la investigación se está concentrando en una célula terrorista sospechosa, compuesta de tres ciudadanos saudíes, muy posiblemente vinculado a Al Qaeda.

El departamento que compartían estos saudíes en Massachusetts, cerca de Boston, fue registrado después del interrogatorio de uno de los sospechosos, un estudiante saudí que fue hospitalizado con graves quemaduras en las manos. Uno de sus compañeros de piso fue detenido por “problemas de visa.” Un tercero está libre. Los tres provienen de una prominente familia saudí perteneciente a una tribu de la provincia de Asir en la frontera con Yemen.

La búsqueda del tercer hombre llevó al aterrizaje de un avión en el Aeropuerto Internacional Logan. Entretanto, la investigación se ha ampliado a lugares dentro y fuera de Boston en la búsqueda de cómplices de la célula.

Los orígenes de la célula saudita, de ser confirmada su existencia, sugieren que la rama Arabia de Al Qaeda – PECAL-consiguió establecer una célula en los Estados Unidos que realizara el atentado con bomba de Boston – y posiblemente más de una en otras partes de los EE.UU. La provincia de Asir es conocida como un foco de resistencia al trono saudí en Riad.

Los EE.UU. y las autoridades policiales encargadas de la investigación se niegan a confirmar si los sospechosos están bajo custodia, o incluso si conducirán a quien llevó a cabo los atentados. El presidente Barack Obama dijo en su segunda declaración en 24 horas: “… no sabemos si quienes estaba detrás de los atentados eran extranjeros, nacionales o individuales”. El Presidente se vio obligado a admitir, por primera vez, que el FBI estaba investigando “una acto de terrorismo”.

El de Boston es el maratón anual más antiguo del mundo, con 28.000 corredores que representan a los atletas de todos los estados de EE.UU. y más de 90 naciones. Sin embargo, no había perros a lo largo de la ruta entrenados para olfatear explosivos o algún helicóptero policial con sensores para detectar explosivos en los presentes en la línea de llegada después de las explosiones.

El martes por la mañana, la policía de Boston y los oficiales de seguridad anunciaron que estaban buscando a dos fugitivos: Uno fue descrito como moreno, con acento extranjero, el rostro parcialmente oculto por una capucha, con una mochila grande; intentaba ingresar a una sección cerrada cerca de la línea de llegada. Ésta fue la primera vez que se mencionó un área cerrada al público.

El segundo hombre fue fotografiado por un espectador mientras caminaba en una azotea con vista a la línea de meta después de que explotara la segunda bomba.

Después del evento, la policía desactivó otros tres artefactos explosivos.

Fuentes: Excelsior y Debka Files