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La presencia de McDonald’s en Israel ha pasado controversia durante sus 20 años de historia en la nación judía -los clásicos arcos dorados enfrente del memorial de la Brigada Golani, en recuerdo a los soldados después de la Primera Guerra Árabe Israelí, fue sólo el inicio de estas tensiones-.

No muchos de sus locales sirven Kashrut -alimentos recomendados bajo el precepto de su religión- y sólo pueden hablar hebreo en el trabajo -teniendo inmigrantes rusos y árabes allí-.

Pero la cereza, si bien no es grave per se, la origina un nuevo spot publicitario (ni tan nuevo, subió el 10 de abril en Youtube, así que…) en la que se ve al presidente Obama yendo al McDonald’s. El detalle: según la historia de esta publicidad, ninguno de los trabajadores estaban laborando, y los agentes -CIA, FBI, llámelos- terminan secuestrándoles para preparar el Big America Burgers.

Cuando llega la limusina, como si todo hubiera quedado cronometrado, el presidente lanza su orden y el trabajador sólo atina a seguir manteniendo la comida, hasta que Obama la recibe y lanza el “Dios bendiga Israel – por una gran América” -en un evidente juego de palabras con el nombre de la comida y que a Estados Unidos se le llame “America” en inglés-.

Curiosamente el Big America Burger se vende en Estados Unidos, por lo que no necesita Barack Obama ir a Israel para hacerse con uno.

Fuente:https:aeronoticias.com