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28 de abril 2013.-Activistas por los derechos humanos y de la mujer protestaron el viernes, junto con familiares de víctimas de la violencia de género, por los asesinatos cometidos contra mujeres en la sociedad árabe. Durante las horas de la mañana partieron dos caravanas de coches. Una de ellas partió desde el sur y la otra desde el norte del país. A medida que iban pasando por cada diuad se iban sumando más vehículos. Al mediodía las dos caravanas, que en ese momento ya sumaban más de 250 vehículos, se reunieron en Kfar Kara, ubicado en Wadi Ara, y celebraron la ceremonia central.

“Rechazamos legitimar el asesinato de mujeres. Aspiramos a construir una sociedad que condene todas las formas de violencia, especialmente el asesinato”, escribieron los organizadores en los folletos que fueron entregados a los transeúntes. Según datos difundidos, en los últimos diez años fueron asesinadas 75 mujeres árabes.

Anad Salman, una activista del Negev, expresó: “Las mujeres están recurriendo a todos y cada uno de la sociedad, para asumir responsabilidad y llevar adelante una acción personal para proteger a nuestra sociedad de la violencia y poner fin a los asesinatos de mujeres en la comunidad. Esto es un fenómeno que parte de la desintegración y debilidad, y que refleja la exclusión política, económica que sufren los árabes”.

En tanto, Faoizia Faisal, quien perdió a su hija en febrero de 2010, cuando fue asesinada por su marido, en Nazareth, expresó esta mañana: “Mi mensaje a la comunidad árabe es no hacer silencio. Mi hija fue una mujer que sufrió mucho, pero la mayoría de las veces se calló. Nosotros como sociedad obramos en favor de silenciar y finalmente ella-por su hija- terminó pagando con su vida. Sus tres hijos crecerán sin madre ni padre ya que éste último está tras las rejas. Es hora de decirle basta a la violencia y basta de asesinatos de mujeres”.

Otra de las participantes de la marcha, Marwa Daher, quien también perdió a su hija en junio de 2011, contó: “Cada día siento y sufró más la pérdida y el asesino circula libremente. Estoy enojada y decepcionada de la Policía y las instituciones gubernamentales que no hacen los suficiente. No puedo cerrar los ojos por pensar que el asesino de mi hija está circulando libremente por las calles. Pido a que salgan a gritar nuestra angustia”. Su hija fue asesinada cuando había ido a visitar a su hermana en Ramle.

Samah Salaima Igbryah, activista por los derechos de la mujer en Lod y Ramla, y leyó una carta para los diputados árabes que representan a la población árabe-israelí en la Knesset: “Creo que hoy es la primera prueba de la relación entre los diputados árabes y quienes los han votado. Quien realmente está comprometido en la lucha de la sociedad contra la violencia, nos esperará en la entrada de su pueblo y tendrá en sus manos un cartel que diga “Sí a la vida, No a los asesinatos de mujeres”. Los mismos diputados deben explicar al público y especialmente a las familias de las víctimas qué hicieron ellos para a los asesinos de sus seres queridos a la cárcel, el sitio natural que les corresponde por naturaleza. Nuestros diputados pusieron la cuestión de la mujer árabe en los programas electorales, y ahora llegó el momento de actuar”.

Fuente:prensajudia.com