C

Enlace Judío México | 12 de agosto de 2013.-Panamá rechazó una solicitud de Corea del Norte vía fax para buscar una vía que excluyera a la Organización de Naciones Unidas (ONU) en la solución de una crisis que estalló el mes pasado por el hallazgo de una carga bélica “no declarada”, propiedad de Cuba y transportado en un buque norcoreano, según una fuente oficial de alto rango de la cancillería panameña.

El Gobierno de Ricardo Martinelli alegó ante el país asiático que el caso está sujeto a las inspecciones de una comitiva formada por 12 expertos internacionales—seis oficiales y seis asistentes—del Consejo de Seguridad de la ONU que llegará este lunes a la capital panameña y permanecerá esta semana en ese país, para revisar las armas y verificar si fue violado el embargo mundial de armamento impuesto en 2006 en contra de Pyongyang como castigo a su plan de desarrollo nuclear.

La misma fuente señaló a El País que “una solicitud norcoreana para que el incidente ‘se resuelva de manera diplomática’, es decir, excluir a la ONU, no procede, porque precisamente el caso está en manos de su Consejo de Seguridad, que deberá emitir su resolución en cuanto al análisis del cargamento que viene ahí y si viola o no las sanciones”.

En una “nota verbal” que su embajada en Cuba hizo llegar a la cancillería panameña el pasado viernes por fax, y cuyo contenido fue conocido por este periódico, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Corea del Norte afirmó que “espera la amable cooperación” del Ministerio de Relaciones Exteriores de Panamá “para que el incidente del barco Chong Chon Gang se resuelva de manera diplomática, así como para que, a base de los derechos internacionales y gesto humanitario, se otorgue lo pronto posible el acceso consular de los diplomáticos de esta misión a nuestros tripulantes”.

Los 35 tripulantes están detenidos a las órdenes del Ministerio Público de Panamá, acusados de atentar contra la seguridad colectiva por transporte de armamento peligroso sin declarar. Según el programa oficial, la comitiva de la ONU llegará este lunes en la tarde y permanecerá al menos tres días en suelo panameño.

La misión evaluará si el transporte de la carga bélica en el barco, que zarpó de Cuba con 240 toneladas de armamento oculto no declarado y oculto en 10 mil toneladas de azúcar, violó el embargo internacional de armas implantado sobre Pyongyang y que prohíbe al régimen norcoreano importar o exportar armas.

El Gobierno panameño anunció el pasado 15 de julio el hallazgo del armamento en el buque, que fue retenido días antes cuando se disponía a ingresar al Canal de Panamá para cruzarlo en la ruta del Atlántico al Pacífico y proseguir viaje a Corea del Norte. Al día siguiente, el gobierno cubano admitió que las armas le pertenecen y adujo que es equipo defensivo obsoleto—complejos coheteriles antiaéreos Volga y Pechora, nueve cohetes en partes y piezas, dos aviones Mig-21 Bis y 15 motores de este tipo de avión—llevado a Corea del Norte para ser reparado y devuelto a Cuba.

Con la sospecha inicial de que transportaba drogas, la nave fue allanada por autoridades panameñas y aunque la tripulación se sublevó, se pudo descubrir una primera carga de armas. La embarcación permanece retenida en un puerto panameño sobre el litoral Caribe, mientras prosiguen las tareas de descargada de armas y azúcar. Los tripulantes están detenidos en la misma zona, a la orden del Ministerio Público.

La cancillería panameña informó a este periódico que la nota verbal norcoreana respondió una comunicación similar enviada el 25 de julio por Panamá, en la que se explicó a esa nación las razones por las que se decidió no otorgar visa a dos diplomáticos norcoreanos acreditados en Cuba que pretendían viajar a territorio panameño a dar asistencia consular a los 35 tripulantes. “Uno de los motivos es que no hay relaciones diplomáticas entre ambos países y otro es que el caso está en manos del Ministerio Público”, subrayó una de las fuentes panameñas.

La respuesta, añadió, “fue una reacción a declaraciones contraproducentes de Corea del Norte en las que exigía a Panamá que liberara el buque y en un tono poco diplomático, también exigía que liberara a los tripulantes. Fueron un poco desproporcionadas las declaraciones que hicieron allá en Pyongyang alrededor de la solicitud de visado. Eso, y el tema de que el caso está en la Fiscalía, agravaron la situación y se les negó el visado”.

En la nota verbal del pasado viernes, la cancillería norcoreana informó a la panameña que el barco comercial y sus tripulantes “no tenían ninguna intención de poner en peligro la seguridad del gobierno y pueblo de Panamá ni perjudicar su soberanía”.

Panamá abrió una opción para que los norcoreanos entren en contacto con los tripulantes. Cualquier consideración humanitaria por parte de la cancillería panameña hacia los tripulantes del barco será tratada a través de la Cruz Roja Internacional (CRI), explicaron las fuentes oficiales.

El procedimiento sería que Panamá, por “una cuestión humanitaria”, otorgue visado a dos diplomáticos norcoreanos a solicitud de la CRI. Según el mecanismo propuesto, funcionarios de la CRI escoltarían desde La Habana a los dos y al llegar a Panamá los llevaría al sitio donde están los tripulantes.

“Los diplomáticos no tienen nada que hacer con el buque ni con las armas, porque eso está en manos de las Naciones Unidas. Podrían visitar a los tripulantes, ver las condiciones en que se encuentran, entrevistarlos y de ahí para el aeropuerto, de vuelta a Cuba. Ese podría ser el procedimiento”, relató una de las fuentes.

Fuente:elpais.com