Durante muchos años hemos escuchado que se ofrecen cursos de “Superación Personal”. Estos cursos se imparten por diferentes partes de la ciudad a quien esté interesado en el tema, sin la necesidad de tener algún tipo de preparación. Los comentarios de la mayoría de las personas que han tomado estos cursos, incluyéndome a mí, se refieren a éstos como de gran ayuda en su vida personal, familiar y social.

El Rabino Elisha Coffman presentó una plática acerca de este tema y explicó:

“Son muchos los retos que se presentan en la persona cuando busca cambios en su vida diaria, personal y familiar”.

“No hay nada más importante en la vida que el cambio personal, pero es un camino largo, lleno de riesgos insospechados y sinuosos. Todo cambio importante en la personalidad implica la valoración de premisas, reemplazo de unas ideas por otras, priorizar hábitos antiguos por nuevos. Todo esto exige reacomodos en la vida. Tomar en cuenta que se presentarán retos; entre los que se encuentran:

1.Cuando tú cambias, cambia la manera en que te relacionas con los otros. Uno se relaciona con las personas de la manera que uno es. Lo que yo soy transpira fuera de mí mismo, en mis palabras, en mis actos y en mis actitudes. También la manera en que yo actúo influye en la manera en que los demás se relacionan conmigo.

2.Al intentar cambiar, descubrirás aspectos de tu personalidad que desconocías y no necesariamente estarás preparado para esa percepción de ti mismo. Encontrarás en ti la causa por la que querías cambiar, cuando eres consciente de lo quieres cambiar. La persona que cambia se puede volver intolerante ante la forma de ser de las personas que lo rodean. La persona que hace cambios debe de ser cuidadosa en los cambios que quiere hacer para no sobrepasar los límites de su personalidad y así no afectar a otros. Habrá que reacomodar la forma de vida. La persona que hace cambios descubrirá facetas de su personalidad que ignoraba y en muchas no estará preparada para esos descubrimientos.

3.-Al intentar cambiar se darán cuenta de que no era tan fácil como creían, mucha gente cree que mejorar la personalidad es simplemente una cuestión de efectuar un pequeño cambio aquí y allá, sin mayor impacto en el resto de su persona. Es falso, los seres humanos somos complejos, increíblemente complejos. Cualquier pequeño cambio, pero real, afecta al resto de la personalidad y por ello a la vida entera. Estos cambios no se pueden llevar a cabo de la noche a la mañana.

En conclusión, dependiendo siempre de la persona con la que tratemos, será la forma en que nos comportemos. Entre las reglas para los cambios están: “Sin prisa, pero sin pausa”, y “Los pequeños actos, despiertan pequeños cambios”.

“Cuando queremos hacer cambios deben de ser en nosotros mismos, no buscar el cambio en el otro. En tolerancia y aceptación de la forma de ser del otro (amigo, esposo, hijo, padre o madre) encontrará la paz en la relación de estas dos personas”, afirmó el Rabino Coffman.