shofar

Algunos nutricionistas sostienen que para adelgazar debemos comer de día y adelgazar de noche. Al despertar, el cuerpo humano aumenta la producción de adrenalina, dopamina y cortisolm, proveedores de la energía suficiente para estudiar, trabajar y hacer deportes, al producir cambios metabólicos que aumentan la presión sanguínea y el nivel de azúcar en la sangre. De este modo, los alimentos que ingerimos en el desayuno son ideales para formar un depósito de hidratos de carbono (glucógeno) en el hígado y, por lo tanto, se recomienda la ingestión de hidratos de carbono al desayunar, siempre antes del mediodía. Porque a partir de ese momento, la adrenalina, el cortisol y la dopamina comienzan a disminuir a niveles muy bajos hasta las 19 horas. Si desayunamos correctamente, nuestro hígado será el proveedor de azúcar en la sangre por el resto del día y no habrá necesidad de ingerir hidratos de carbono luego del mediodía. Este es el secreto para comenzar a adelgazar y /o mantener el peso. No estoy tan seguro que esto sea cierto, aunque se puede hacer el intento…

Nos encontramos en las 7 semanas de consuelo -Shivá shel Nejamata- que acompañan al período desde el final de Tisha Be´Av -9 de Av- hasta el inicio del nuevo año 5774, período en el que se intensifica auto juzgamiento en un sumido y exhaustivo balance sobre nuestra vinculación con el prójimo y con D-s. Hay una eterna discusión para saber cuál es el momento apropiado para comenzar a recitar las Selijot (Servicio religioso de Perdón). Los Sefardim entienden que este tiempo abarca todo el mes de Elul –el último mes del calendario hebreo- mientras que los Ashkenazim aseguran que basta con realizar esta oración en la salida del Shabbat anterior a Rosh Hashaná –Año Nuevo-.

El rabino principal de Israel Sefardí analiza en su Shut –preguntas y respuestas rabínicas- Ijavé Daat, algunas consideraciones en torno al tiempo y características de las Selijot. Rabbi Ovadia Yosef, responde al interrogante: quien no pueda levantarse temprano por la mañana para pronunciar las Selijot, en todos los días del mes de Elul, ¿es considerado a unirse a un minian –quorum religioso- que pronuncia Selijot en el comienzo de la noche?

Este rabino, de origen bagdadí nos enseña que hay una costumbre de decir las Selijot justamente bien temprano por la mañana, y está basado en lo que explica el Zohar en Parashat Jaiei Sara 132b, que en las horas de la mañana se despiertan los benevolentes en el mundo. Porque está escrito en el Tehilim 42:9, “de día D-s me ordenará su benevolencia”.

En tanto, desde la hora de Minjá hasta la mitad de la noche se despiertan los atributos de la sentencia. Por ello, está escrito en relación a la destrucción del Beit Hamikdash –Templo de Jerusalén-: ¡Ay de nosotros, porque el día declina, Porque se extienden las sombras del anochecer! –Irmiha 6:4-. Así, el día es de benevolencia y la noche representa la sentencia y el juicio que nos lleva a la destrucción. Pero, lo interesante es que desde esta visión, en la mitad de la noche vuelven a despertarse los benevolentes con sus atributos de misericordia, y por ello, es agradable cantar los salmos y alabanzas del Rey David, porque está dicho –Tehilim 119:62-: A medianoche me levantaré a alabarte sobre los juicios de tu justicia.

Las Selijot son el momento para revindicar nuestras vidas. Es el tiempo propicio para reconocer que los odios, los rencores y las broncas nos engordan. Cuando ponemos a un prójimo en el estatus de “enemigo”, le damos demasiadas oportunidades a nuestra mente. Fomentamos multitud de pensamientos negativos que se recrean en nuestra mente: venganza, envidia, rencor, etc. Selijot es el ejercicio de olvidar ese acontecimiento y perdonarlo. El lema es ser feliz, dejar que nuestra vida transcurra positivamente al margen de los pensamientos mezquinos que no deben tener cabida en nuestra mente.

El judaísmo algo entendió de la dieta, y las Selijot son nuestra oportunidad. Nuestra dieta de las 19hs la plantea el Zohar con un mensaje claro. ATENCIÓN: Toda alimentación posterior al horario de Minjá puede engordar tu avaricia, el desprecio, la envidia, la mentira, la venganza, el odio, el rencor la desconfianza, la cobardía, la ira, el engaño, el olvido, la soberbia, la hipocresía, el desdeño, la humillación. Señoras y señores, ¡todos comenzamos un estricto régimen!

Lee el artículo original