Enlace Judío México | 05 de 0ctubre 2013.- El líder supremo de Irán, el gran ayatolá Alí Jamenei, ha declarado este sábado su apoyo a las actividades diplomáticas del presidente Hasan Rohani en la pasada Asamblea General de la ONU, a pesar de que algunas de ellas podrían ser consideradas como “inapropiadas”, en referencia al acercamiento sin precedentes en 30 años con Estados Unidos que el jefe de Gobierno de la República Islámica desarrolló durante su visita a Nueva York.
“Apoyamos la iniciativa diplomática de este gobierno y concedemos importancia a sus actividades en este viaje, pero algunas cosas que sucedieron en Nueva York no fueron apropiadas, siempre a nuestro entender”, indicó el gran ayatolá en sus primeras declaraciones tras la celebración de la Asamblea General.
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Rohani culminó su visita a Nueva York con una llamada histórica al presidente de EEUU, Barack Obama, en lo que se trató del contacto a más alto nivel entre ambos países desde la Revolución iraní de 1979 que culminó con la llegada al poder del actual régimen clerical.
Desde entonces, las relaciones entre ambos países son inexistentes, y están marcadas por la tensión sobre el supuesto programa de armamento nuclear iraní, cuya existencia Teherán niega categóricamente.
El ayatolá expresó su pesimismo sobre los contactos con el Gobierno estadounidense, que describió como “arrogante, poco fiable e indigno de confianza”, además de estar controlado por “una red internacional sionista”, según comentarios recogidos por la cadena iraní Press TV.
Entre tanto, iraníes han irrumpido en gritos de “Muerte a Israel” y “Muerte a Estados Unidos”, mientras quemaban banderas de ambos países después de las oraciones semanales, marcando un fuerte contraste con la simpatía que mostró su nuevo presidente con Occidente.
El ayatolá Kazem Sedighi, un importante clérigo iraní, criticó a Washington por amenazar con nuevas sanciones contra Irán e instó a Obama a trabajar con el nuevo presidente Hassan Rouhani, mientras insultaba a Israel.
Ayatolá Kazem Sedighi, importante clérigo:
“El presidente de EE.UU., después de cambiar de postura, no debería verse influido por el primer ministro del falso, débil y despreciable régimen de Israel y no debería cambiar de tono tan rápidamente. Barack Obama debería venir y unirse a Irán y levantar las sanciones. Las palabras no son nuestro único criterio; estamos a la espera de que se emprendan acciones que verifiquen lo dicho”.
Los cantos habituales después de los servicios del viernes, reflejan una imagen diferente de la que Rouhani intenta enviar al mundo, intentando lograr intercambios innovadores con el presidente de EE.UU. Barack Obama, con ocasión de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Rouhani se ha etiquetado a sí mismo de moderado, pero parece no tener problemas en ser complaciente con las facciones iraníes más extremistas. Antes de dar su discurso en las Naciones Unidas, asistió a un desfile militar con misiles capaces de atacar a Israel, mientras decía que las negociaciones con la comunidad internacional tenían que reconocer el derecho de Irán a enriquecer uranio.
Israel mantiene que Rouhani es un “lobo con piel de cordero” y que nada ha cambiado dentro del régimen iraní, pues el líder religioso supremo, el ayatolá Jamenei, tiene la última palabra en Irán.
Fuente:elpais.com/es.jn1.tv/
