SAMUEL SCHMIDT PARA ENLACE JUDÍO

Enlace Judío México- Cuando llegas hasta arriba te das cuenta que todo aquello de los partidos políticos desaparece, ahí están los que en verdad mandan en el país. Estas fueron las palabras de un hombre que llegó hasta el segundo nivel en el gabinete presidencial, puesto que tuvo que dejar cuándo descubrió un fraude tramado para beneficiar a uno de los forjadores de los monopolios creados bajo el cobijo del Estado. El fraude estaba respaldado más allá de las líneas partidistas, y el error de este buen hombre fue denunciar y bloquear, hasta donde pudo, la maniobra cuyo costo hoy pagan todos los mexicanos. No solamente salió del puesto, lo hizo denostado con la reputación hecha trizas y el fraude se consumo.

Es raro que un funcionario que llega a ese nivel descubra, aunque sea en una mesa de café, las maniobras sucias que encontró. Infiero que la confesión se debió a su necesidad de empezar a limpiar su imagen, a demostrar que no es parte de esos manejos sucios, y a denunciar los muchos abusos que sufre la sociedad mexicana sin enterarse siquiera.

Muchas veces hemos sostenido que México no es un régimen democrático, aunque eso se refiere a los estilos de gobierno y el manejo de las instituciones políticas, pero este tipo de despojo se logra solamente un régimen autoritario porque se sostiene en un manejo oligárquico de la política.

Alguien sostiene que México es controlado por 36 familias, las que podrían ser menos; esto se refiere a la riqueza acumulada por esas personas, cuyo peso en las decisiones económicas es fundamental, pero también lo tienen en la política, porque a final de cuentas, son los políticos los que dan el aval y soporte decisorio para cumplir la voluntad de esas familias. Valga como ejemplo que más de un gobierno se desvive por engrosar las arcas de Carlos Slim con contratos públicos.

Dado el esquema de corrupción existente en el país, algunas de las familias políticas están íntimamente ligadas a esa oligarquía, ya sea porque son beneficiarios de grandes proyectos económicos, porque se asocian con ellos, porque algunos oligarcas se prestan a ser prestanombres, o bien porque su corrupción les ha permitido amasar grandes fortunas (Hank).

Mucho se habla en el país sobre los gobernadores que realizan grandes proyectos para beneficiarse en lo personal. También aquí hay un cambio sustancial en la corrupción.

Los buenos corruptos como Alemán o Echeverría invertían en el país el producto de sus negocios, vox populi dice que esos negocios o eran el cobro de comisiones o negocios per se, por ejemplo el desarrollo de Ciudad Satélite en el Estado de México o Acapulco, eran negocios de la época de la modernidad; ahora vemos grandes proyectos de irrigación con gran impacto ambiental para beneficiar las tierras de un gobernador o de algún líder legislativo.

Hay por supuesto los corruptos de baja moralidad como los panistas y hasta ahora denunciado uno del PRI, que piden mochada por cumplir con su trabajo legislativo.

La nueva corrupción anti moderna le permite a ciertos políticos alcanzar niveles de riqueza que jamás hubieran alcanzado con trabajo honesto.

Este peso de la oligarquía nos explica las inclinaciones de los políticos, del color que sea, por seguir líneas que no pueden beneficiar a la sociedad. Algunos ejemplos bastarían:

Salario. Se ha congelado en términos reales para hacer que el país sea más “competitivo”, de esa manera el mexicano trabaja más y gana menos, esa riqueza producida termina concentrándose en el 0.01 de la población.

Concentración de actividades fundamentales. La televisión, el radio, las comunicaciones, la gran ingeniería, el cemento, la harina de maíz, están concentradas en las manos de algunas de esas 35 familias, que presionan para que no haya cambios que descompongan su participación en esos negocios mientras les permite ampliar sus emporios aunque sea con fuertes distorsiones. La familia dueña de TV Azteca, posee una cadena de tiendas y se les autorizó a abrir un banco donde prestan con tasas de usura.

Desprotección societaria. Finalmente han logrado golpear los temas tabú, eliminaron las protecciones agrarias, cambiaron la ley del trabajo para despojar de protección a los trabajadores, la ley financiera para fortalecer a los bancos y van con todo por el petróleo.

La oligarquía esta vinculada internacionalmente, de ahí puede explicarse tanta presión para abrir PEMEX, sin descartar lo que ganaran algunas de las familias políticas que están prestas para dar el zarpazo.
Esto explica porque la alternancia PRI-PAN-PRI no descompuso las grandes políticas, como el marco neoliberal, que benefician a los grandes negocios, y muestra porque consideran enemigo a López Obrador, el discurso de AMLO no es paranoico, su llegada anunciaba un reacomodo en las reglas del juego y eso es algo que la oligarquía no puede aceptar por ningún motivo.