Enlace Judío México- Un tema crítico en las negociaciones entre israelíes y palestinos es el futuro del Valle del Jordán. En un vídeo publicado por el Jerusalem Center for Public Affairs explica y detalla por qué Israel no puede retirarse de la zona y depender de las fuerzas internacionales.
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Un video publicado por el Jerusalem Center for Public Affairs explica y detalla las razones por las que Israel no puede retirarse del Valle Jordán y depender de tropas internacionales.
El documento comienza con una pregunta: “¿Debe Israel Israel retirar sus fuerzas armadas del Valle Jordán y confiar en tropas internacionales para su seguridad? Algunos políticos y diplomáticos de todo el mundo dicen que sí. Pero el 70 por ciento de los israelíes dicen que no”.
Luego, se pregunta: “¿Quién tiene razón? ¿Son las tropas internacionales confiables?”. Seguido brinda ejemplos del desempeño de las tropas internacionales.
Egipto
Después de la crisis de Suez en 1956, la Fuerza de Emergencia de las Naciones Unidas fue desplegada en la península del Sinaí con el fin de servir como amortiguador entre Israel y Egipto. Pero en 1967, el presidente egipcio Gamal Abdel Nasser exigió que las fuerzas de la ONU se retiren- cosa que hicieron inmediatamente. Nasser amenazó a Israel con la aniquilación y por ende estalló la Guerra de los Seis Días.
Líbano
En 1978, los grupos terroristas en el sur del Líbano realizaron varios ataques contra Israel. En respuesta, el ejército israelí entró en el Líbano con el fin de destruir los bastiones de los terroristas. Las Naciones Unidas intervinieron mediante el establecimiento de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano o la UNIFIL. Su misión era asegurar la retirada israelí y ayudar a controlar al gobierno libanés el sur del país. El ejército israelí se retiró, pero la FINUL no logró detener los ataques terroristas contra Israel. Esta fue la razón que llevó a la Primera Guerra del Líbano en 1982.
Más tarde ese año , una fuerza occidental multinacional formado por estadounidenses, británicos, franceses y las tropas italianas llegó a Beirut. En 1983, esta fuerza fue blanco de dos atentados masivos de Hezbolá contra sus cuarteles. 241 tropas francesas de América y 58 murieron. Las fuerzas multinacionales regresaron a casa a los seis meses.
Un avance rápido hasta 2006, cuando la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU puso fin a la guerra entre Israel y Hezbolá de 34 días. La resolución pedía el desarme de Hezbolá. Desde entonces , la FPNUL en el Líbano ha visto Hezbolá rearmarse. El ejército terrorista ahora tiene más cohetes que antes del comienzo de la guerra en 2006 .
Gaza
En 2005, los observadores europeos estaban apostados en Rafah, en la frontera entre Gaza y Egipto con el fin de impedir el contrabando de armas. Pero cuando los enfrentamientos entre Hamas y Fatah se intensificó en 2006, los militares de la UE abandonaron sus posiciones – y corrieron a Israel por seguridad. Como resultado, las armas fluyeron hacia Gaza, y los civiles israelíes fueron sometidos a fuego de cohetes constante en los años que siguieron.
Siria
Dado que las consecuencias de la Guerra de Yom Kipur, la Fuerza de Observación de la Separación de las Naciones Unidas, o de la FNUOS, ha servido en los Altos del Golán a fin de separar a los ejércitos de Israel y Siria y para mantener el alto el fuego entre ellos. Pero con la región cada vez más insegura, como resultado de la guerra civil de Siria, muchos países han retirado sus contingentes de la FNUOS y envió a sus soldados a casa.
El futuro del Valle Jordán
Desde 1967, el Valle del Jordán ha servido como una barrera geográfica de formidable protección de Israel. Ha sido la primera línea de su defensa en el este. El ejército israelí se ha desplegado a lo largo de sus laderas empinadas, lo que le permite frustrar la infiltración de terroristas y disuadir potenciales ataques de ejércitos hostiles.
Esta zona crítica no puede ser entregada a las fuerzas internacionales que han demostrado sobradas veces ser ineficaces y poco fiables. Ethos nacional de Israel es uno de autosuficiencia. Israel nunca ha solicitado que sus aliados derramaron la sangre de sus soldados para su defensa.
Fuente: Prensa Judia
