Muchos cristianos israelíes se dan cuenta que sólo un Israel fuerte les proporcionará libertad y seguridad. Los jóvenes en la comunidad cristiana desean enlistarse en el ejército israelí.
ESTHER PELED PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO
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Enlace Judío México | Una revolución silenciosa se está llevando a cabo en la comunidad Cristiana-Israelí de habla árabe. Más y más jóvenes cristianos se consideran primeramente israelíes y se niegan a doblegarse a intereses políticos que no les benefician.
Estos jóvenes desean formar parte del estado de Israel y de la sociedad israelí en todos los aspectos. Esta iniciativa deberá aplaudirse por todo aquel que apoya un enfoque democrático y humanístico, considerando al individuo como ciudadano antes que nada.
Pero no todos comparten esta actitud. La revolución cristiana-israelí tiene muchos enemigos, no sólo en círculos de árabes nacionalistas, sino también en la extrema derecha judía y la extrema izquierda judía. Estos tres grupos, claramente distintos, promueven la misma posición racista-Kahanista que rechaza el reclutamiento de cristianos israelíes. Los tres ven a los cristianos israelíes como ¨árabes¨ o ¨no-judíos, ¨ no como ciudadanos israelíes con derechos y obligaciones.
Afortunadamente, la gran mayoría de los israelíes no comparten este racismo y apoyan esta impresionante revolución. Pero apoyo tácito no es suficiente. Ha llegado el momento de que la mayoría silenciosa presione a sus políticos, de derecha y de izquierda, para que respalden – tanto en hechos como en palabras a los ciudadanos que desean contribuir.
Los miembros de la comunidad cristiana-árabe-israelí están divididos por su identidad. Algunos se consideran árabes palestinos y en un estado libre y democrático esta elección debe respetarse. Pero muchos otros, que hasta ahora han vivido ocultados y en silencio, por momentos no se consideran palestinos ni árabes. Algunos en este grupo han re-descubierto sus raíces en la tierra ancestral de Israel, en la cultura aramea y griega.
Estas creencias se han creado en base a la consciencia de que el estado de Israel no es un fenómeno pasajero, ni un fenómeno negativo por supuesto. Considerando la violencia fanática religiosa y sectaria en los países vecinos, muchos cristianos israelíes han concluido que sólo un Israel fuerte puede asegurar su libertad personal y religiosa, prosperidad y bienestar, así como protegerlos contra el destino de las minorías en los países vecinos. Ellos comprenden que se futuro se encuentra en Israel y por lo tanto desean integrarse plenamente y contribuir lo mejor posible.
El deseo de enlistarse en el ejército no es sorprendente. Mientras el ejército sea la experiencia formativa de la mayoría de los jóvenes en el país, el servicio militar será necesario para una amplia integración social.
Esta no es una decisión legal, sino una reflexión de una realidad sociocultural. Es la razón por la cual miles de personas con discapacidades insisten en integrarse como voluntarios. Es la razón por la cual más y más jóvenes mujeres religiosas que pueden no enlistarse, insisten en hacerlo. Es la razón por la cual muchos inmigrantes desean formar parte. Se dan cuenta que sólo el servicio militar los convertirá en israelíes en todos sentidos. Es el por qué jóvenes desadaptados insisten en servir al ejército. Es también la razón por la cual jóvenes cristianos quieren reclutarse: se dan cuenta que el no hacerlo conduce a la discriminación.
Recientemente, varios políticos se han identificado con cristianos que desean unirse a las Fuerzas de Defensa Israelíes. Se identifican con el líder espiritual del grupo, el padre Gabriel Nadaf y con la organización que él fundó, el Foro de Reclutamiento Cristiano Israelí. Pero esta identificación y apoyo moral no es suficiente. El estado debe dar una mano.
Por ejemplo, es inconcebible que las FDI aún no tengan miembros del clero cristiano. Así como el ejército de los Estados Unidos tiene rabinos, las FDI deben de integrar al clero cristiano para cubrir las necesidades de los soldados cristianos y a los qadis para servir a soldados musulmanes. Asimismo, la Comisión del Servicio Civil debe de actuar para nombrar a cristianos israelíes que han servido en las FDI o que han cumplido el servicio social para posiciones adecuadas en el gobierno.
La decisión de muchos cristianos israelíes de involucrarse en el estado y enlistarse en las FDI es nada menos que un milagro. Estos pioneros pueden formar parte de una revolución para que la comunidad no judía forme parte integral de la sociedad israelí. Los líderes del estado deben tomar medidas inmediatas para ayudarles. Esto es importante para nosotros y lo que se debe de hacer.
Fuente: Uri Shenhar, Haaretz
Uri Shenhar es el consejero legal del Foro de Reclutamiento Cristiano Israelí.
