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Enlace Judío México | Se probó que los niveles bajos y constantes de la hormona del estrés pueden causar estragos en el sistema inmunológico.Junto con el Dr. Idan Harpaz y el Prof. Hagit Cohen, el Prof. Monsonego caracterizó, por primera vez , los mecanismos que causan daño a la regulación del sistema inmune en los ratones expuestos a estrés crónico.

Las personas que están bajo un estrés constante son vulnerables a desarrollar un trastorno autoinmune, según una nueva investigación del profesor israelí Alon Monsonego de Ben- Gurion del Negev.

“Mi experiencia es en neuro- inmunología, un campo muy emocionante donde tratamos de entender el diálogo entre los dos sistemas. Creemos que no hay ningún síndrome neurológico que no tenga nada que ver con el sistema inmunológico”, dijo.

Junto con el Dr. Idan Harpaz y el Prof. Hagit Cohen, Monsonego caracterizó, por primera vez , los mecanismos que causan daño a la regulación del sistema inmune en los ratones expuestos a estrés crónico.

Su investigación, publicada en el European Journal of Immunology, analiza lo que ocurre en el eje hipotalámico -pituitario – adrenal ( HPA ), que cubre el trayecto entre el cerebro y el sistema inmunológico.

Cuando alguien experimenta estrés agudo, el HPA envía mensajes a las glándulas suprarrenales para liberar cortisol, la hormona que suprimir el sistema inmune de forma temporal.

“Esta es una respuesta esencial del cuerpo para protegerse, una especie de retroalimentación biológica. El aumento del nivel de la glucosa [de cortisol ] te da energía para hacer frente a la tensión aguda en cuestión de segundos”, explicó Monsonego.

Sin embargo, en personas crónicamente estresadas – como adictos al trabajo – los bajos niveles de cortisol están constantemente corriendo a través del torrente sanguíneo. Con el tiempo, el sistema inmunológico comienza a ignorar la señal.

“El control de la regulación del sistema inmunológico se daña y, como reacción, tenemos un sistema inmunológico más agresivo”, dijo. Esto es similar a la forma en la que los antibióticos pueden conducir a desarrollar “superbacterias” más agresivas.

“El estrés provoca la supresión inmune, pero, al mismo tiempo, las células que sobreviven [a la supresión ] son más agresiva y no responden al aumento de cortisol”, destacó.

Fuente:prensajudia.com