AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO

Ella quiso ser judía en un mundo católico; gay en una sociedad judía ortodoxa: Orly Halfon se dio cuenta, desde pequeña, que no encajaba en su entorno.

Hoy, casada con su pareja (mujer) y reunida con sus hijos, ha encontrado la plenitud en la congruencia. Ésta es la historia de una mujer que luchó por lo que quería- y lo logró.

De padre judío y ausente, Orly creció en un entorno cristiano. Dice:

“Desde pequeña me intereso el judaísmo, supe desde siempre que era diferente a las personas de mi alrededor.Yo me sentía diferente y extraña, mi formación católica nunca llego a satisfacer mis necesidades. Recuerdo que mi abuela me llevaba a la iglesia pero (el párroco) no respondía todas las dudas que surgían en mi. ¿Porque D- os son tres? Siempre creí que D-os es uno, un mismo ser
Mi abuela me decía que la religión no se cuestiona.

A la vez, mis tíos me leían y enseñaban literatura, historia romana etc, en una ocasión señalaron el judaísmo y sus significados. Fue en ese preciso momento cuando supe que yo pertenecía a esa religión, que yo era judía, lo supe desde el fondo.

Decidí acercarme a mi papá y preguntarle sobre mi religión, su única explicación fue que yo no era judía porque mi mamá era católica, él si era judío y yo no.

En el 2003, me convertí al judaísmo en el templo de Ramat Shalom. Soy la única persona de toda mi familia que decidió regresar al judaísmo”.

Orly también es lesbiana, y también lo supo desde temprana edad:

“En el colegio de monjas, pude constatar mis diferencias con las otras niñas, mi lesbianismo comenzó a notarse. Pude asegurarlo cuando me enamoré de mi maestra de preescolar, a mis compañeros hombres les gustaba la maestra, a mis amigas los hombres, y yo siendo como mis amigas me gustaba la maestra, comenzaba a percibir algo extraño en mi comportamiento.

En los años de crecimiento reafirmé mi gusto por las mujeres, este era mi secreto.

Ya adulta, decidí hacer un cambio en mi vida, me fui a Chicago a estudiar musica y religion, judaismo, estaba en mi momento de crecimiento y aprendizaje.

Hace 7 años, mi primer pareja mujer fue quien me invitó a una marcha gay. No podía entender que existían otras mujeres como yo, tantas mujeres con diferentes preferencias sexuales”.

Intentó tener una vida “normal”: se volvió judía ortodoxa y se casó con un hombre que conocía sus preferencias sexuales. Tuvo hijos, fue profesora en un colegio judío religioso. Respetó todas las leyes referentes a la mujer hasta que llegó al punto de quiebre: no podía pretender ser quién no era.

“Comencé una relacion con un hombre, ésta no me gusto ya que él no tenía el lado femenino que inconscientemente estaba buscando.

Conocí a quien sería mi esposo; siendo novios, quise dejarlo y cayó en un estado depresivo.
Tuve miedo que se hiciera daño, continuamos nuestra relación y decidimos casarnos. Él conocía mis preferencias sexuales; aún así, nunca le dio importancia.

En 2004 nos casamos, tuvimos a nuestra primera hija, fue algo maravilloso. Me enamoré perdidamente de mi hija, de mi hijo pero jamás pude enamorarme de mi esposo.

Duré 10 años en mi matrimonio. Traté de llevar un matrimonio, tuve relacione sexuales durante siete años con mi esposo, en los últimos 3 años comenzaron los problemas, las discusiones y diferencias.

Al final ya no pude más. Decidí separarme. Mi esposo acudió con los rabinos, trató de manipularme, obligándome a regresar por medio del judaísmo. Ellos trataron de convencerme que regrese con mi esposo, a la vida anterior que yo llevaba.

No volví. Perdí la custodia de mis hijos, los cuales recuperé más tarde. Hoy, ellos tienen 16 y 18 años. Ambos son heterosexuales.

Las preferencias sexuales no cambian, no se puede modificar los sentimientos de la persona”.

Preguntamos a Orly: “Basándose en tu estudios, ¿qué dice el judaísmo de la homosexualidad?”

“Yo no creo en un D-os que me haya hecho de esta manera, sin que me sea permitido ser yo misma.

Por mis preferencias sexuales y experiencias de vida me fui “clavando” más en el estudio de la Torá, fue ahí donde descubrí que el lesbianismo no está vetado en la Torá, nunca se habla de la homosexualidad femenina, los estudiosos críticos de la Torá fueron quienes conjuntaron el caso de Sodoma y Gomorra, la historia de Egipto con múltiples historias pasadas y acordaron que ni se prohíba ni se aceptaba.

En mi particular percepción, los judíos siempre han sido una minoría, siempre han sido el pueblo perseguido, creo que por esta razón los rabinos no han permitido un comportamiento distinto a las normas sociales.

El Talmud menciona que el hombre es bestial, es Nefesh, entonces si dos hombres se aman deben de llegar a un amor no sexual, a un amor de cariño.

La Torá menciona que las mujeres somos más allegadas a D-os, sí dos mujeres se juntan una debe de asumir el papel del nefesh, del deseo, y procurar tener relaciones sexuales para que ambas no se conviertan en ángeles.

Orly se casó en segundas nupcias con su pareja mujer. Ésta es la foto de la boda, Orly a la derecha:

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Halfon está estudiando para ser rabina. ¿Cómo se dio esta decisión?

“Todo comenzó por Barbra Streisand, en la película “ Yentl”, justo eso es lo que quería hacer, estudiar en una yeshiva y así lo hice.

No me bastó mi biblioteca, no me bastaron todos los libros. Siempre quería más,conocer estudiar.

He llegado muy lejos y ahora estoy estudiando para ser rabina. Con esto me basta, tener el titulo, seguir estudiando; aun así me encantaría tener mi congregación.

A la pregunta “¿Crees poder tener una congregación en México?” ella responde: ” Ya creo en todo, después de ver el video “ Yo tampoco “ de Guimel, ya creo en todo.

Hoy en dia creo que todo es posible”.