MORRIS STRAUCH PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO

 

Israel, Yakov y Lola Strauch
Israel, Yakov y Lola Strauch

 

¿Cómo se llama tu papá?

-Israel

-Mmm….

La respuesta no le gustó a mi lererke (1) de pre primaria; después de 3 min, aproximadamente, recordé su nombre de cariño:

-Izo

-Ah!

Yo creo que la comparación le hizo conformarse con el primer nombre.

Izo, Iza –la z suena sh- es el diminutivo de Israel en polaco; raro entre nosotros que se nombre a un hijo como a Eretz Israel (2). Como que mi zeide (2′) dejaba escrito en el nombre del más pequeño de sus hijos el camino a seguir después de las venideras políticas de extinción humana del Regierung (3) de Berlín.

Mi mamá algo me contó de la guerra y la esclavitud nazi cuando yo era muy pequeño, creo que sobre la muerte del amigo de papá que mataron al salir a buscar papas de noche para comer en la fábrica de cohetes V2. La sopa de reemplazo, ersatz, para sobrevivir como zombis, esclavos en la fábrica, no era suficiente, un día le tocaba a papá robar papas y otro a su amigo, el volado de la muerte cayó del lado de aquel, cuando Izo salió a buscarlo ya no pudo más que enterrar su cuerpo. Su nombre seguramente nunca lo voy a saber, pero quisiera.

Después, en la Naye, en paz descansa, papá nos visitaba cada año el día de Yom Hashoá (4) para contarnos y recordar los malos años en los que Europa quedó acéfala, auto consumiéndose, recibiendo el tiro de gracia que le faltaba al continente después de la Primera Guerra Mundial. Para entonces, el Holocausto ya era otro miembro de la familia para mí.

Después de la Naye, Yom Hashoá lo conmemorábamos en los centros de la comunidad, con Galek, Gilbert, Baruhovich, Schlosser, Wasserstrom y otros amiguitos de papá, que bendito sea, sobrevivieron también. Izo siempre subía al estrado a decir unas palabras y a leer su yidishe poem: “Vei die toyern fun Krematorium” ,“A las Puertas del Crematorio”.

En los años de la guerra, septiembre, para no variar, fue el mes elegido para escalar la locura nazi a nivel mundial: Invadir Polonia. Papá tenía 14 años, su pueblo, Koszyce, del polaco kosz -canasta, en el distrito de Pinczow, provincia de Kielce. Eran una familia de seis, nuestros abuelos Abraham y Eva – Avi y Hava – y cuatro hijos, Yakov -Jasa, Yasha- el mayor, dos en medio, e Israel -Izo. Según los censos de la época había otros 694 yidn (5) en Koszyce aparte de nuestra familia. A veces papá iba con el abuelo a acompañarlo a vender telas en el pueblo y alrededores.

Por el 10 de septiembre de 1939, W.V. Reichnau, el mismo de la matanza de Babi Yar, y su 10 Armee (6), tuvieron la amabilidad de tomar Kielce; la Wermacht, SS y Gestapo se estacionaron en Kazimierza Wielka, cerca de Koszyce, no tenían prisa por marchitarla, pasó tiempo antes de que le quitaran su aliento; el miedo de muchos les salvó la vida al huir a la URSS, otros se quedaron. Este fue de los pocos detalles que papá se atrevió a contarme:

Cuando llegó a casa de la escuela, ésta estaba vacía, un vecino tuvo el tino de acercársele y contarle lo sucedido, las fuerzas nazis tomaron casa y familia. Tenía 2 opciones, el bosque o el gueto; solo el gueto le daba la oportunidad de encontrar a nuestros tíos y abuelos. El gueto sí fue un tema tabú, conmigo no mencionó una palabra de él, debió ir al de Bochnia o al de Kielce, eran los 2 más cercanos, y en él debió hacerse pasar por carpintero o por conocedor de cualquier oficio que le permitiera ir de esclavo a alguna fábrica: Arbeit macht frei (7).

En efecto, la fábrica de cohetes V2 le dio uso y una cálida bienvenida con 5 cuerpos ahorcados en la entrada, cada mañana. Esclavos de lujo en el proyecto militar más costoso de la guerra, los primeros cohetes militares de largo alcance creados por el hombre. Ahora me entero que dicha industria costó el equivalente a US 3mil millones; después de la guerra el V2 fue el cohete base para los cohetes de propulsión del proyecto espacial Saturno de la NASA. Durante la guerra se utilizaron para atacar Londres, Amberes y Lieja, -por suerte no llevaban la firma de papá, eso hubiera sido muy embarazoso- pero al final de la guerra, en 1945, ni los V2, ni los esclavos podían salvar al Reich, así que se cerró su producción e Izo y sus compañeros fueron llevados por tren a una fosa común.

Como las vías del tren ya habían sido bombardeadas se tuvieron que desviar al campo de concentración de Bergen-Belsen para allí ser ejecutados y cremados. La inquilina más famosa de este campo situado en la Alemania norte, más específicamente al norte de Hanover, fue Anne Frank. Afortunadamente papá debió llegar en el último grupo de victimas, poco antes del rescate inglés que los sacó el 15 de abril de 1945. No se me olvidan sus palabras: “Nos liberaron los ingleses, pesaba 36kg y lo primero que nos dieron fue agua y azúcar, para no morir por indigestión.”

La única otra sobreviviente de Bergen-Belsen que conozco es Dolly Bestandig, nacida en el gueto de Vilna, más joven que Izo, se salvó al ser una bebe que escondieron dentro de un bote de basura. Ella vive –bis hundert und zwanzig (8)– y todavía asiste al grupo de Kol Hanisayon y al CDI en México, caminos de leche y miel para Dolly.

Suecia recibía refugiados de guerra al término de esta, ella debió ser un oasis para papá, allá las listas de sobrevivientes se publicaban continuamente, y no quiero imaginar la ansiedad con que las revisaba. Tuvo que esperar 3 o más años hasta que apareció un nombre: Yakov Strauch, el tío Yasha. Se encontraba en Polonia y ya era funcionario del nuevo gobierno polaco de postguerra, Yasha se casó con la tía Lola Kauffman.  Izo volvió a Polonia, muy a su pesar, pero reencontrar a Yasha se convirtió en el sentido de su vida.

Izo, Yasha y la tía Lola cumplieron el deseo milenario de nuestro pueblo, Hashana Aba’a ve Yerushalayim –El Próximo Año en Jerusalem. Papá salió del infierno y regresó a Israel, o en otras palabras, Israel regreso a Israel. Sirvió en el Tzáhal como artillero, guardó posiciones en el Neguev, se casó, procreo 4 hijos, nos dio la vida, nos dio techo, comida y educación, aportó a su comunidad en Israel y en México.

Yasha murió en Israel en febrero de 1995, papá 3 meses después, en México, el 23 de mayo, Lola vivió su viudez dos años más en Israel.

De todas las frases que le recuerdo a papá, me quedo con esta: “Hitler no pudo conmigo…”

Tate (9), escribiendo desde el lugar que tú escogiste para escribir tus memorias, y sin poder parar de llorar y temblar, te pido perdón, tardé 50 años en darme cuenta lo difícil que fue tu camino, yo no lo hubiera hecho tan bien como tú, te amo.

 


1 Maestra

2 Tierra de Israel

2’Abuelo

3 Gobierno

4 Día del Holocausto

5 Judíos

6 Ejército

7 El Trabajo Libera

8 Hasta los 120 (originalmente: Hasta los 100 como de 20)

9 Papá