AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO

Januca vela 3

DANIEL BEN ITZJAK

Los Sabios hebreos nos enseñan que el primer conjunto de números con significado propio, son el uno, el dos y el tres.

Una mesa recién alcanza su equilibrio cuando suma tres patas.

Los patriarcas son tres y no dos.

Tres y no cuatro.

Intentemos comprender.

Cuando hay “uno”, sin darme cuenta, ya estoy diciendo que hay “otro”.

Porque no dije “único”, dije uno.

Es decir, cuando digo “uno” es como si dijese “primero”, y el segundo, entonces, ya está implícito.

Uno y dos.

Pero también cuando digo “uno” y “dos”, necesariamente existe una relación entre ellos, un vínculo, un puente: el “tres”.

Uno, dos y tres.

El tres es el más capacitado para hacer la paz entre el uno y el dos.

Cuando dos tienen problemas, visitan a un tercero.

El tres es el número de la avenencia y del acuerdo.

La Paz verdadera se establece entre opuestos y enfrentados.

Entre dos orillas.

La energía de la tercera vela de Jánuka es apta para el acuerdo y la reconciliación.

Para intentar la Paz, aunque hoy nos parezca lógicamente imposible.

Pero el Milagro, siempre, pero siempre, se ubica por encima de la lógica.

 

Fuente: Daniel ben Itzjak – Reflexiones y pensamientos de Torá