JOSEPH  LIEBERMANN, EX SENADOR POR CONNECTICUT

La semana pasada, 23 congresistas demócratas solicitaron al vocero John Boehner (R-Ohio) posponer el discurso del Primer Ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ante una reunión conjunta del Congreso, programada para el 3 de marzo. Sin embargo,  queda absolutamente claro que el vocero no pospondrá la invitación ni la rescindirá.

El Primer Ministro de Israel se dirigirá al Congreso.

Por lo tanto, insto a los 23 individuos y a otros miembros del Congreso que estén indecisos a que acudan a esa reunión conjunta a escuchar lo que el Primer Ministro tiene que decir. Aquí les sugiero algunas buenas razones para ello:

  1. Acudan porque se trata de determinar la mejor manera de impedir que Irán obtenga más armas nucleares y no sólo otra prueba de Washington sobre lealtad partidista y política.
  1. Acudan porque- sin importar lo que piensen sobre los líderes involucrados o sus acciones en este caso- ustedes son firmes partidarios de la alianza entre Estados Unidos e Israel y no quieren que se convierta en una cuestión de partidos.
  1. Acudan porque saben que la Constitución les da, como miembros del Congreso, el poder para “regular el comercio con naciones extranjeras”, “definir y castigar… ofensas contra la ley de las naciones”, “declarar la guerra”, “crear y mantener ejércitos” y “proveer y mantener a la Marina”, y Netanyahu podría decir algunas cosas informativas sobre cómo pueden ejercer esos grandes poderes.
  1. Acudan porque saben que Israel es uno de nuestros aliados más cercanos y firmes y sienten que tienen una responsabilidad de escuchar hablar a su líder sobre desarrollos que él piensa que podrían amenazar la seguridad, independencia e, incluso, la existencia de su país, así como de nuestros aliados más cercanos en el mundo árabe.
  1. Acudan porque les preocupa que no se trata únicamente de la seguridad de Israel y de las naciones árabes, sino de la seguridad de Estados Unidos, la cual se verá amenazada si se logra un mal acuerdo con Irán que le permita construir armas nucleares que podría poner en sus cada vez más capaces misiles de largo alcance.
  1. Acudan porque están preocupados por la proliferación de armas nucleares y creen que un negocio defectuoso con Irán no solo lo colocará en el camino hacia convertirse una potencia nuclear sino que también guiará a algunos de los vecinos árabes de Irán a adquirir armas nucleares lo más pronto posible.

En resumen, hay demasiado en juego en las negociaciones con Irán para que los miembros del Congreso decidan no escuchar lo que Netanyahu, o cualquier otro aliado, tiene que decir al respecto. Así como el Primer Ministro británico, David Cameron, mereció una atención respetuosa cuando recientemente llamó a miembros individuales del Congreso para pedirles que retrasaran la adopción de más sanciones sobre Irán, y los ministros extranjeros de Alemania, Francia y Gran Bretaña merecieron una lectura respetuosa cuando hicieron la misma petición al Congreso en una opinión editorial en The Post, así también el Primer Ministro de Israel merece ser escuchado respetuosamente por los miembros del Congreso cuando hable la próxima semana.

En este momento tan inestable de la historia, no podemos y no debemos apartar nuestra atención de la que sigue siendo la mayor amenaza a la seguridad de Estados Unidos y del mundo.

Fuente: The New Yorker/ Traducción: Miriam Baley.