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Enlace Judío México- Nuestro experto en genealogía judía, Alejandro Rubinstein, está respondiendo las numerosas peticiones acerca del origen de sus apellidos. Pide paciencia a quienes las han enviado. Aun así, nos aclara que la duda acerca de si el apellido es judío debe ser atendida por quienes tienen autoridad en dicho foro: los rabinos.

La petición de nuestra audiencia:

Buenas tardes:

Soy argentina, de segunda generación.  Mis abuelos paternos son italianos, oriundos de Bari: Abuelo Salvador Bran y Abuela Pascua Tambone.  Mis abuelos maternos son españoles, oriundos de Andalucía: Abuelo Francisco Soler y Abuela Elisa Cervantes.

Por lo que veo en vuestro listado, ¡3 de mis cuatro apellidos son sefaradíes!

Es esto para mí una sorpresa tremenda, porque hasta donde yo sé, somos católicos apostólicos romanos. Todos hemos sido bautizados en esa fe.

¿Me podría brindar más información al respecto? Me interesa mucho.

 Muchísimas gracias.

Ariadna Bran Soler

La respuesta de nuestro experto en genealogía judía, Alejandro Rubinstein:

El caso de nuestra lectora es extremadamente interesante. Anuncia su origen italiano por parte paterna siendo que sus abuelos responden o respondían a los apellidos Bran y Tambone.

Bran es un típico apellido de judíos ya que, de manera particular, acuñan la clasificación de apellidos acrónimos. Los acrónimos son, en lingüística moderna, (del griego ἄκρος -transliterado como akros- ‘extremo’, y ὄνομα -transliterado como ónoma— ‘nombre’) puede ser una sigla que se pronuncia como una palabra y que, por el uso, acaba por incorporarse al léxico habitual en la mayoría de casos, como láser (Light Amplification by Stimulated Emission of Radiation)- o también puede ser un vocablo formado al unir parte de dos palabras. Este último tipo de acrónimos funden dos elementos léxicos tomando, casi siempre, del primer elemento el inicio y del segundo el final, como bit (Binary digit).

El significado de un acrónimo es la suma de los significados de las palabras que lo generan. Por ejemplo, el apellido Bran se conforma de los vocablos Ben RaNajman. No se trata nada más de esta compleja aunque divertida forma de generar nuevas voces sino, por lo contrario, se da un sentido especial al apellido que en este caso proviene de la gran personalidad del rabino Najman de Breslov quien naciera en aquella ciudad ucraniana el 4 de abril de 1772, correspondiente al primer día del mes de Nisan del 5432 acorde a la cronología hebrea. Continuador y pilar del movimiento jasídico, fue bisnieto del Rabino Israel Ba´al Shem Tov quien fundara el movimiento jasídico y diera cauce, con su nombre, al apellido acrónimo Besht (Beal Shem Tov). El Rebe de Breslav, como es más conocido, hizo de la alegría y de la oración herramientas centrales en su método espiritual que al día de hoy le permite tener miles de seguidores, quienes vistan su tumba en Umán cada año nuevo judío.

El ser un hijo o, cuando menos reputarse un descendiente de su corriente filosófica y de práctica religiosa, permite que adopte la fórmula ya analizada como apellido definitorio y transmisible a las generaciones de su portador.

Tambone es un apellido frecuentemente localizado en la Toscana, en específico en Ruvo de Puglio, en la zona sureña de Bari y que puede derivar en apelativos familiares como este por su cercanía al monte homónimo, localizado en la Toscana o a la más cercana ubicación de la fosa Tambone en Giovinazzo, Bari.

Antigua y noble familia, originaria de Lombardía, aparece citada por el Comendador G.B. di Crollalanza con un blasón para esta familia en los volúmenes de su Diccionario Histórico Blasónico de las Familias Nobles e Italianos Notables. También existe otra rama de esta antigua y noble familia, originaria de Veneto.

Visto que el apelativo Tambone proviene de Bari, este puerto adriático de la Italia meridional, fue uno de los centros florecientes de Apulia según la tradición que fueran fundados por los judíos cautivos, traídos a consecuencia de la destrucción del Segundo Gran Templo, en el año 70 de la Era Común por Tito. Al no existir referencias históricas demostrables de su antiguo origen, la Comunidad de Bari se apoya en la leyenda que indica que era conocida como un centro de aprendizaje talmúdico.

Los judíos de Bari experimentaron una serie de vicisitudes. Fueron incluidos en los decretos de conversión forzosa emitidos por los emperadores bizantinos en los siglos IX y X. En unos 932, el barrio judío fue destruido por la violencia y varios judíos fueron asesinados. Entre 1068 y 1465 los judíos en Bari sufrieron las reclamaciones rivales del rey y el arzobispo de impuestos sobre los judíos en la ciudad. Los judíos en Bari también fueron víctimas de la campaña para convertir a los judíos al cristianismo iniciada por Carlos de Anjou en 1290; en 1294, 72 familias se vieron obligadas a adoptar el cristianismo, pero continuaron viviendo en Bari como neofiti (cripto judíos). Allí siguió un siglo y medio de tranquilidad hasta el barrio judío fue atacado nuevamente en 1463. En 1495, durante los disturbios que acompañaron la invasión francesa, fueron saqueadas propiedades judías con valor de 10,000 ducados. La expulsión de los judíos del Reino de Nápoles en 1510 – 11 selló el destino de aquellos en Bari: un pequeño número fueron readmitidos en 1520 y finalmente, obligados a abandonar en 1540 – 41.

La vida comunitaria judía se reanudó brevemente durante la Segunda Guerra Mundial cuando, en 1943, muchos judíos de otras partes de Italia y Yugoslavia se refugiaron en Bari de los territorios ocupados por los nazis. Hacia el final de la guerra se estableció un campamento de refugiados en Bari.

Es, pues, bastante comprensible que siendo de Bari los antecesores de nuestra lectora, que hayan sufrido conversión forzosa por el lado de la familia de su abuelo paterno pues, en la perspectiva lingüística del apellido de su abuela paterna, no hay antecedentes de judíos portadores de su nombre familiar.

Por lo que respecta al lado hispano, Soler es un apellido que es citado en algunas fuentes como un apelativo empleado por judíos conversos o perseguidos, como es el caso de los autores Pere Bonnin en Barcelona y Manuel Hernández Gómez en México.

No es el mismo caso en el de Cervantes, en donde se ha aducido, sin prueba formal o concluyente, que el autor Miguel Cervantes de Saavedra tuviese origen judío y, por tanto, dejar tal rasgo en su descendencia. No hay documentación valedera que sustente esta hipótesis como tampoco hay evidencias del empleo de este nombre de familia por miembros del Pueblo de Israel.

Católicos apostólicos romanos…sí, su bautismo lo confirma. Pero existen antecedentes judíos en su ascendencia, ya sea italiana o española.

 

 

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