AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO

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Cuatro personas se  escabullen a través de la valla fronteriza México- Estados Unidos, después de cruzar ilegalmente la frontera en Nogales, Arizona, el 31 de mayo de 2010. (AP / Krista Kennell / Sipa Press) 

El grupo terrorista Estado Islámico está operando un campamento en Chihuahua, a sólo ocho kilómetros de la frontera con Estados Unidos, informó hoy Judicial Watch.

Citando fuentes que incluyen un “oficial de grado de campo del Ejército mexicano y un Inspector de la Policía Federal de México”, el grupo de vigilancia informó que el Estado islámico, también conocido como ISIS o ISIL, está organizado a sólo unos kilómetros de El Paso, Texas, en el barrio Anapra de Juárez y en Puerto Palomas.

Judicial Watch dijo que los “coyotes” que trabajan para el Cártel de Juárez están contrabandeando terroristas  del Estado islámico a través de la frontera con Estados Unidos, entre las ciudades de Nuevo México de Santa Teresa y Sunland Park, así como “a través de la porosa frontera entre Acala y Fort Hancock, Texas”.

“Estas áreas específicas fueron objeto de explotación por parte de ISIS debido a la debilidad de sus fuerzas policiales municipales y de distrito, y por ser esta área  uno de los muchos refugios no controlados de contrabandistas de drogas a gran escala”, informó Judicial Watch.

Fuentes de inteligencia mexicanas dicen que el Estado Islámico pretende utilizar los ferrocarriles y las instalaciones del aeropuerto en las cercanías de Santa Teresa, Nuevo México.

“Las fuentes también dicen que ISIS tiene, ‘observadores’ situados en las Montañas Potrillo Este de Nuevo México (en su mayoría gestionados por el Bureau of Land Management) para ayudar en las operaciones de cruce de fronteras terroristas”, informó Judicial Watch. “ISIS está llevando a cabo el reconocimiento de las universidades regionales; del White Sands Missile Range; de las  instalaciones del gobierno en Alamogordo, Nuevo México;  y de las instalaciones de energía eléctrica cerca de Anapra y Chaparral, Nuevo México”.

Fuente: Washington Times