AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – Publicado originalmente bajo el título, “Cuentos de hadas turco de tío Tayyip”.
por Burak Bekdil*  Instituto Gatestone 30 de mayo 2015

Jerusalén siempre ha tenido un lugar espectacular en el corazón y la mente de un islamista de Turquía. Pero el fervor preelectoral en Turquía ha elevado su “fetiche Jerusalén” a nuevas alturas.

Los islamistas de Turquía de hoy se parecen al segundo presidente de Egipto, Gamal Abdel Nasser, un nacionalista pan-árabe, y sus comandantes del ejército hace casi medio siglo. El 16 de mayo de 1967, Nasser ordenó al Comandante de la Fuerza de Emergencia de las Naciones Unidas, Indar Jit Rykhye, evacuar sus tropas de la zona de amortiguamiento del Sinaí en 48 horas. Cuando Rykhye preguntó a un comandante egipcio si Egipto era consciente de las consecuencias, el comandante respondió: “Oh señor, te veré en el almuerzo en Tel Aviv”. La fuerza de la ONU se fue, y Egipto e Israel se quedaron solos para librar la guerra de 1967. Este autor no saber dónde almorzó el comandante egipcio al día siguiente, pero definitivamente no en Tel Aviv. Sus palabras, sin embargo, pueden haber inspirado a los líderes de Turquía.

El Primer Ministro Davutoglu, ex ministro de Asuntos Exteriores, ha reiterado en innumerables ocasiones desde que se unió al gabinete de Turquía en 2009 que, “Vamos a orar en la mezquita al-Aqsa en la capital palestina ‘Quds’ ([Jerusalén]”. Este deseo está pendiente de ser cumplido. Pero eso no desalienta a los líderes turcos de abrigar crecientes dosis de “fetiche-Jerusalén”.

Cuando un político kurdo dijo en un discurso público que “Jerusalén es la ciudad santa para los judíos”, un Davutoglu furioso celebró una manifestación y dijo a voz en cuello: “Jerusalén es nuestro lugar santo” y que él nunca permitiría que cambie el “carácter islámico” de la ciudad.

Davutoglu, en otro discurso de mitin electoral, añadió: “Un día, al-Aqsa definitivamente alcanzará la liberación … Jerusalén es nuestra causa eterna”. En otro discurso, Davutoglu afirmó que su gobierno ha enfrentado múltiples intentos de golpe de Estado sólo porque él dice: “Jerusalén es nuestra causa”.

Aun en otro, afirmó que el último período de Jerusalén en paz era “nuestra época (otomana)”.  Y en otro, conmemoró a “los turcos, árabes, kurdos, Zaza (una tribu kurda) y árabes en el glorioso ejército de Saladino”. Es como si, para Davutoglu (y Erdogan), Jerusalén no hubiera existido antes de 1187. Si de verdad no existió, por qué los turcos hablan de su “conquista”, un eufemismo que siempre parecen preferir para evitar la palabra “ocupación” o “invasión”.

El Presidente Erdogan no tiene ideas menos excéntricas. “Jerusalén”, según el presidente, “es el lugar más sagrado de los musulmanes y pertenece a los palestinos”. En un discurso reciente, él afirmó que los judíos esn [secretamente] educando a las personas sobre la fe zoroástrica en los campamentos de montaña. “Tenemos pruebas [que lo demuestran]”, añadió Erdogan. Sin embargo, nunca ha aportado esta “evidencia”.

Más recientemente, en un discurso pronunciado el 15 de mayo, Erdogan dijo que: “Lamentablemente, nosotros los musulmanes perdimos nuestro objetivo de dirigirnos hacia Jerusalén. El agua de nuestros ojos se congeló, lo que nos cegó, y nuestros corazones que estaban destinados a latir por Jerusalén están ahora en cambio condicionados a la rivalidad, en un estado de guerra entre nosotros“.

En otras palabras, Erdogan está llamando a la ummah [la comunidad musulmana] para poner fin a sus conflictos con el fin de unirse detrás de una marcha yihad hacia Jerusalén. Esto no es sorprendente para el Islam político de Turquía, cuyo nexo ideológico árabe es la Hermandad Musulmana. Mohammed Badie, Guía Supremo de la Hermandad Musulmana, declaró en un mensaje público publicado por el diario egipcio Al-Ahram, que “los sionistas sólo entienden la fuerza”, y que los árabes no pueden aspirar a lograr la justicia de los judíos” en los pasillos de las Naciones Unidas o por medio de negociaciones”, citando a Badie,

Ha llegado la hora de que la nación islámica se una en torno a un hombre por amor a Jerusalén y Palestina … Los judíos han dominado la tierra, extendieron la corrupción en la tierra, derramaron la sangre de los creyentes y en sus acciones profanaron lugares sagrados, incluyendo a sus propios sionistas … sólo entienden el lenguaje de la fuerza y ​​no cejarán sin coacción … Esto sólo ocurrirá a través de santa yihad, altos sacrificios y todas las formas de resistencia. El día que se den cuenta que marcharemos por este camino y levantaremos la bandera de la jihad por la causa de Dios, ese será el día que vayan a ceder y dejar su tiranía.

¿Es Erdogan el hombre alrededor del cual la nación islámica debe unirse por el bien de Jerusalén y Palestina? Erdogan puede estar pensando que él es la reencarnación de Saladino del siglo 21. Lo mismo pueden creer sus Hermanos Musulmanes y aliados de Qatar. Para el resto de los musulmanes, todo esto es meramente “cuentos de hadas del Tío Tayyip.”

*Burak Bekdil, con sede en Ankara, es columnista del diario turco Hürriyet y miembro en el Foro de Medio Oriente.

 

Traducción: Silvia Schnessel para Enlace Judío México