Netanyahu 2_optMIRIAM BALEY PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO. “Irán no está construyendo misiles balísticos para atacarnos, sino para atacarlos a ustedes: los EE.UU, el gran Satán”: el 4 de agosto de 2015, Netanyahu respondió en línea a las cuatro preguntas de los judíos norteamericanos.

Pregunta #1- ¿Qué hubiera sido  necesario agregar al presente acuerdo para que Israel lo adoptara como un plan viable para prevenir que Irán adquiera un arma nuclear?

Bueno, creo que yo ofrecí dos alternativas y apoyé dos alternativas distintas. La primera alternativa es desmantelar las sanciones a cambio de desmantelar el programa nuclear de Irán. Ésa era, de hecho, la posición de Estados Unidos, hasta el acuerdo interino de 2003. Estaba apoyado en una base bipartidista.

Pero, una vez que Estados Unidos se retractó de esta posición, ofrecí otra alternativa: no un desmantelamiento total pero sí limitar significativamente el programa nuclear de Irán, y vincular el levantamiento de sanciones en ese programa a un cambio en el comportamiento de Irán, es decir, que paren el terrorismo y la agresión regional. Y yo delinee esa alternativa en un discurso que di frente al Congreso de los Estados Unidos. Así que simplemente es un error decir que no ofrecí alternativa alguna y que no aceptaría ningún acuerdo. Hubiéramos aceptado un buen acuerdo. Éste no es un buen acuerdo.

Ahora, quisiera tomar esta oportunidad para disipar una cantidad de declaraciones falsas sobre la posición de Israel y sobre el acuerdo.

En primer lugar, está la afirmación de que la única alternativa a este acuerdo es la guerra. Eso es bastante gracioso. Hace apenas unas semanas, nos decían que la alternativa a un mal acuerdo era ningún acuerdo.

Ahora, nos dicen que la alternativa a un mal acuerdo es la guerra. ¿Qué cambió en ese tiempo? La respuesta es: nada. La alternativa a este mal acuerdo sigue siendo ningún acuerdo o un mejor acuerdo, uno que limitará el programa nuclear de Irán y ligará el levantamiento de las sanciones en ese programa al cese de las agresiones y el terrorismo iraní.

La afirmación de que yo rechazaría cualquier acuerdo y de que no he propuesto ninguna alternativa, simplemente no es cierta.

Pregunta #2: Si el Congreso de los EE.UU., rechaza este acuerdo, ¿cuáles son las alternativas para prevenir que Irán obtenga la capacidad para [desarrollar] armas nucleares?

Creo que lo más importante es mantener la presión. No solamente mantener las sanciones, sino incrementar la presión. Creo que eso ha probado ser absolutamente efectivo durante las muchas veces que hemos tenido que lidiar con Irán.

Irán quiere dos cosas en este acuerdo: la capacidad de desarrollar armas nucleares y el levantamiento de sanciones.

Supuestamente, las negociaciones harían que Irán escogiera entre ambas cosas. En lugar de eso, el acuerdo le otorgó ambas a Irán: le permitió quedarse con su programa nuclear y que se le levantaran las sanciones. Así que Irán puede tener el pastel y también comérselo.

Existe el mito de que las sanciones colapsarán sin este acuerdo pero no es así. Si los Estados Unidos mantienen o incrementan las sanciones, sucederán dos cosas, Michael, y creo que eso sucederá después de una erosión inicial. Primero, el resto del mundo recapacitará, y hay una razón para ello. Mira, la economía de los EE.UU. es 40 veces más grande que la de Irán. La economía de Irán es de alrededor de 400 mil millones de dólares y la de Estados Unidos es de 17 mil millones de dólares. Por lo que, si una empresa o gobierno extranjeros tiene que decidir entre la economía de Irán y una de 17 mil millones de dólares, ni siquiera lo pensaría.

Entonces, pienso que, luego de una erosión inicial, la comunidad internacional recapacitará con sanciones reducidas.

Segundo, creo que los iraníes regresarán. Ellos necesitan un acuerdo, y lo necesitan mucho más que cualquiera de nosotros.

La mejor forma de prevenir que Irán se haga de armas nucleares es no cambiar. Incrementar las sanciones, incrementar la presión. No entreguen prematuramente la mejor ventaja que tienen.

Pregunta #3: Todos sabemos que  la oposición a este acuerdo ha causado tensión entre Estados Unidos y sus aliados en Medio Oriente, incluyendo a Israel. ¿Cómo ve que avance la relación entre Estados Unidos e Israel?

Creo que la relación entre Estados Unidos e Israel es tan fundamentalmente fuerte que continuará siendo fuerte porque se basa en algo tan profundo; se basa en nuestros valores compartidos.

Cuando los estadounidenses ven alrededor del mundo y, especialmente, cuando ven al Medio Oriente, ven obscuridad, caos, salvajismo, barbarie, y ven una isla ahí, una isla de libertad y democracia, Israel.

Así que, aunque tengamos una seria política de desacuerdo respecto a este acuerdo con Irán, creo que esto es muy fuerte porque se basa en nuestros valores compartidos, y esa relación continuará.

Esta política de desacuerdo jamás ha sido personal. Y nuestra relación es lo suficientemente fuerte como para soportar, incluso, serios desacuerdos, como lo hemos hecho en el pasado.

¿Creo que el Presidente Obama opina que ésta es la mejor forma de manejar la amenaza nuclear de Irán? Sí, creo que sí. ¿Preferiría no tener este desacuerdo? Absolutamente. Pero no estaría cumpliendo con mis responsabilidades como Primer Ministro si no expusiera la gran preocupación de Israel acerca de los peligros de este acuerdo. Y, a pesar del continuo desacuerdo sobre Irán, Israel y los Estados Unidos continúan trabajando juntos, de forma cercana, en un amplio esquema de asuntos que afectan la seguridad nacional de ambos países.

Un Oficial de Defensa de Estados Unidos dijo esta semana: “Somos aliados, y nuestra cooperación continuará sin relación a este acuerdo”. Concuerdo totalmente.

Pregunta #4: Aunque parece haber un consenso político en Israel, en oposición  a los términos del acuerdo, hay algunos veteranos de inteligencia y líderes militares que han expresado su opinión a favor del acuerdo. ¿Cuál es su valoración sobre esta diferencia de opiniones?

Bueno, Israel no es solo una democracia; es una democracia judía. Eso significa que existen muchas opiniones. Y cada uno es libre de expresarlas. Créanme, lo hacen. Lo que es notable, no es que haya algunos israelíes que disienten, sino la abrumadora unidad de opinión a lo largo del espectro político.

Yo represento al público israelí. Alrededor del 70% del público israelí está de acuerdo conmigo respecto al acuerdo.

Los vecinos árabes de Irán, la mayoría de ellos, también están de acuerdo conmigo. Encuestas recientes muestran que la mayoría del público estadounidense concuerda con el público israelí. Ven los mítines anti-Estados Unidos y anti-Israel en Teherán; ven nuestras banderas incendiadas en las calles; escuchan los cánticos de “muerte a Estados Unidos; muerte a Israel”; ven que el régimen de terror de Irán sigue desarrollando misiles balísticos.

Quiero dejarles algo en claro: Irán no está construyendo estos misiles balísticos, los ICBM’s, para atacar a Israel; ya tienen misiles que pueden atacar a Israel por todos lados. Están construyendo estos misiles para atacarlos a ustedes, a los EE.UU. Ustedes son el gran Satán; nosotros, uno más pequeño.

El dictador de Irán, el Ayatola Jamenei, acaba de publicar un libro en el que, una vez más, llama a la destrucción de Israel. No lo hizo en una declaración o en una rueda de prensa, sino en un libro. En discursos recientes, dijo que, a pesar del acuerdo, el enemigo número uno de Irán sigue siendo Estados Unidos de América, y que el conflicto de Irán con Estados Unidos continuará después del acuerdo.

En mis años de vida pública, encontrar un 75% de unidad en cualquier tema es extremadamente raro. Y, cuando eso sucede, cuando los israelíes concuerdan abrumadoramente entre ellos, y cuando los israelíes y los árabes concuerdan abrumadoramente entre ellos, creo que la gente debería poner atención.

Así que ésta es la conclusión de todo lo que he dicho el día de hoy. No dejen que el principal régimen del terror del mundo ponga sus manos en las armas más peligrosas del mundo. Opónganse a este mal acuerdo.

Quiero agradecerles su atención, y quiero agradecerles su amistad y su apoyo. Lo digo de parte de todos en Israel. Gracias.