Uri Levine estuvo en México, como una de las estrellas de la Semana del Emprendedor, pues es un apasionado mentor de jóvenes empresarios. Es co-fundador de Waze, una de las aplicaciones más grandes del mundo basada en una comunidad de tránsito y navegación, que fue adquirida por Google en junio de 2013 por la destacada suma de $1,1 billones de dólares. Levine es co-fundador, presidente activo y primer inversionista en el FeeX, una startup que ayuda a encontrar y reducir cargos ocultos en servicios financieros. Ha estado en el negocio de alta tecnología durante los últimos 30 años, la mitad de ellos en la escena startup y ha visto todo, desde el fracaso hasta el éxito. Gracias a su larga y comprobada experiencia. Uri ha trabajado en todas las posibles áreas de negocio, desde desarrollo de producto, marketing, desarrollo de negocios, puesta en marcha de startups y coaching, principalmente de CEO. En los últimos años ha asesorado y dado conferencias a CEOs, emprendedores y personal de empresas de países de todo el mundo. Ésta es su conferencia en México:

Uri dijo, en entrevista para Enlace Judío: “Quizás Waze nació en Israel porque yo estaba allí”.

Su playera proclamada: “Enamórate del problema, no de la solución”.

¿Te has preguntado alguna vez cómo se hicieron los mapas de Waze? Ésta es la repuesta de Levine en su conferencia:

“Para la creación de mapas, recaudamos información proveniente de GPS (Global Positioning System), y uniendo los datos de varias personas, podíamos obtener tendencias de direcciones en las calles. Poco a poco íbamos creando un mapa de una ciudad.

Como ejemplo: si, a través de los datos, teníamos información que en una calle ningún usuario hacia vuelta a la izquierda, deducíamos que esa era una vuelta prohibida.  Si había una calle donde 100 personas se dirigían en una dirección, el sistema concluía que la calle era de un solo sentido.

A través de este algoritmo obtuvimos un mapa, pero no un mapa con nombres en las calles ni con puntos de interés.

Los nombres de las calles y otras características en los mapas, los pudimos obtener a través de usuarios quienes, usando la aplicación, colaboraban utilizando  herramientas para editar el mapa. Nombres de las calles, así como sus números, y otros puntos de interés iban de a poco siendo añadidos. Se toman aproximadamente 6 meses para hacer un mapa bueno.

Si teníamos a varios usuarios manejando lento, podíamos concluir que había trafico, y de esta manera no solo tener un mapa, sino un mapa con trafico y actualizándose periódicamente.

De esta manera se crea un mapa en tiempo real, mejorando con participación activa de los usuarios”.

Felicidades a los genios israelíes de la programación que hacen que personas despistadas, como quien escribe, lleguen a lugares recónditos, evitando el tráfico.