El discurso del líder palestino estuvo carente de contenido aparte de ser una gran mentira, mientras el pusilánime presidente trató de enhebrar una ruta entre un público palestino con hambre de más ataques, y un camino a seguir
AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO DE MÉXICO – El discurso del presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, transmitido por la televisión palestina el miércoles por la noche fue un discurso no de un líder, sino de un hombre dirigido.
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Las palabras eran las de un hombre con pocas esperanzas y que entiende que su influencia sobre lo que está sucediendo estos días es limitada, un político que se da cuenta que está perdiendo el apoyo del público y tal vez llega al final de su vida política.
Simplemente puede ser que el discurso y lo que allí dijo simbolicen el fin de una era en los territorios palestinos. El público palestino, viendo el discurso en la televisión en casa, oyó palabras sin inspiración, sin esperanza y sin un contenido real – como si por alguna razón el jefe se sintiera obligado a hablar a su nación, pero de mala gana. Además de más acusaciones contra Israel y otra mentira – una grande – no hubo nada para remarcar a los oídos, sean palestinos o israelíes, en el discurso de Abbas.
Tan pronto como la oficina de Abbas dijo a los medios de comunicación en la tarde que planeaba dar un discurso importante a las 8 pm, comenzó la especulación sobre el contenido del discurso anunciado a toda prisa.
Los socios cercanos de Abbas afirmaron que no tenían ni idea. Algunos sugirieron que llamaría a detener la violencia y el derramamiento de sangre en un esfuerzo por calmar las tensiones. Otra versión afirmaba que Abbas anunciaría su próxima jubilación, una medida que probablemente traerá más violencia.
Al final, tal como hizo en la Asamblea General de la ONU, Abbas eligió continuar la incitación contra Israel, incluyendo el recurso de contar una burda mentira. Según él, Israel ejecuta niños palestinos, como Ahmed Manasra, 13. Pero Manasra, cuya foto Abbas mostró, está hospitalizado y está siendo atendido en el Hospital Hadassah Ein Kerem, y ni siquiera está en un estado que amenace su vida, después de ser herido en el ejercicio de un ataque punzante en Pisgat Zeev el lunes.
A pesar de la desesperación incolora evidente en los comentarios de Abbas, no pronunció una incitación total, como solía hacer su predecesor, Yasser Arafat. El líder de la AP no hizo una declaración tipo “un millón de mártires están marchando sobre Jerusalem”. Sobre todo, hizo acusaciones contra el lado israelí.
Y esto es digno de destacar: una de las principales razones por las que la actual ronda de violencia ha permanecido en la capital y no ha hecho metástasis a Cisjordania es el propio Abbas.
Cisjordania no se arrastró al caos; hay protestas contra Israel todos los días, pero su escala es muy pequeña. Incluso el martes, anunciado como “Día de la Ira”, sólo unas 2.000 personas protestaron por toda Cisjordania, una cifra insignificante en comparación con las dos intifadas anteriores.
La pregunta es cuánto tiempo más logrará Abbas mantener a Cisjordania con bozal, y no menos importante – ¿cuánto tiempo más querrá hacerlo?
El discurso del miércoles ilustra que el líder palestino y los que le rodean están deliberando cómo proceder. Un buen número de altos funcionarios de Fatah quieren escalar la confrontación con Israel, especialmente organizando protestas masivas, pero Abbas está contra esta medida. También exigen el fin de la cooperación de seguridad con Israel – Abbas se resiste a esto también. Y de hecho, la coordinación de seguridad con las agencias de seguridad palestinas en Cisjordania es en gran parte la razón por la que las protestas tienden a ser pequeñas.
La única bala que queda en la revista del presidente de la AP, por así decirlo, es presionar con dirigirse a instituciones internacionales como la Corte Penal Internacional de La Haya, como mencionó en su discurso el martes.
Sin embargo, esta medida no es nueva ni representa un cambio de juego. Con toda probabilidad, Abbas continuará con el plan de Saeb Erekat de “internacionalizar” el conflicto y espera ver un incremento de la presión mundial sobre Israel.
Este camino puede hacer que Abbas pierda la calle palestina, que quiere ver venganza y ataques de terror, obligándolo a caminar por la cuerda floja: Mientras es probable que sus tropas frenen activamente los ataques terroristas y la violencia en Cisjordania, él apoya la violencia desenfrenada y evita condenas de terrorismo.
Un Abbas fuerte podría haber labrado un camino diferente, pero para un líder débil, esta es la única opción abierta, no muy diferente del primer ministro de Israel, que tampoco puede proponer soluciones a largo plazo para la situación y se limita a prometer utilizar medidas más duras contra el “terrorismo”.
Por lo tanto, el tigre de papel pronunció un discurso la noche del miércoles. Por otra parte, el discurso también puede haber sido un último intento de ganarse a la opinión pública palestina, actualmente paralizada por una chusma de adolescentes de Jerusalem Este metidos en juergas punzantes. Hace mucho tiempo que perdió público en Israel.
Fuente: The Times of IsraelPost / Simona Weinglass
Traduce y edita: Silvia Schnessel para Enlace Judío México
https://www.enlacejudio.com/2015/10/15/un-discurso-sin-dientes-de-un-abbas-sin-colmillos/
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