El Shabbat que precede a Purim se llama Shabbat Zajor (= ¡Recuerda!). En este Shabbat se sacan dos Sefarim, en uno se lee la Parashá semanal, en este caso VAYIQRÁ y en el otro, un Maftir especial en Debarim 25:17, ZAJOR . “Recuerda lo que te hizo Amaleq cuando saliste de Egipto … Amaleq atacó a los indefensos… y no temió a Di-s… ¡¡no te olvides!!”.

amaleq

RABI YOSEF BITON

Cuando salimos de Egipto, Amaleq nos atacó. Fue un ataque sin provocación, sin razón ni motivo. Israel no era en absoluto una amenaza para Amaleq o su territorio. Las razones de Amaleq para atacar a los judíos no eran “lógicas” sino más bien,  usando un término moderno: “ideológicas”, “étnicas”.

Hay algo en los judíos que Amaleq no tolera. No es el poder de los judíos o el dinero de los judíos. ¿Qué poder o dinero teníamos los esclavos recién escapados de un larguísimo cautiverio?   No era tampoco una cuestión territorial: estábamos en el desierto y no estaba en nuestros planes atacar el territorio de Amaleq.

Estuvimos en guerra con muchas naciones. A veces era una disputa por un territorio, o a quién debíamos subyugarnos y pagar impuestos (Babel o Egipto). O incluso conflictos de orden religioso (los griegos vs. los Jashmonaim, etc). Pero con Amaleq es diferente. Amaleq odiaba (y odia) a los judíos “incondicionalmente”.

Creo que la mejor forma de identificar a Amaleq, y definir la actitud de Amaleq (y el antisemitismo en general) es entendiendo que Amaleq atacó al pueblo judío no por lo que el pueblo judío “tiene” o por lo que el pueblo judío “hizo”, sino por lo que el pueblo judío “es”.   Lo que el judío tiene, hace o deja de hacer es una excusa, que cambia permanentemente. Algo que Amaleq usa como pantalla para justificar su odio.

Amaleq y sus descendientes “ideológicos” (conocidos como “‘zejer Amaleq”) pueden ser claramente identificados por las siguientes características:

  1. El odio de Amaleq hacia los judíos no está motivado por conflictos territoriales, venganza o por sentirse amenazados. Es un odio obsesivo hacia el pueblo judío (Irán, por ejemplo, ¿qué razones tiene para amenazar borrar a Israel del mapa? Israel no representa una amenaza a Irán; no hay territorios en disputa, y ni siquiera comparte alguna frontera geográfica con Israel…)
  1. Amaleq atacará y tratará de matar judíos. No importa si son civiles, mujeres o niños (¿Recuerdan el jardín de infantes en ma’alot en 1974? 22 niñitos fueron masacrados por Arafat y el PLO. O el asesinato de la familia Fogel en Itamar? La sinagoga de Har Nof? En las últimas semanas representantes de Amaleq han matado a decenas de Yehudim en Israel. Hombres, ancianos, mujeres y niños. Y también han matado a cuchillazos judíos fuera de Israel. En Paris, Milan, Londres, Bruselas, Miami, California, New York, y recientemente en Paysandú, Uruguay).
  1. El odio de Amaleq a Israel es un odio suicida. Amaleq está dispuesto a practicar el martirio (auto inmolación, ataques suicidas, etc.) con tal de eliminar a un judío. El odio de Amaleq hacia los judíos es superior al amor de Amaleq por sus propios hijos.
  1. Amaleq podrá odiar a otros pueblos temporariamente, pero su obsesión interminable es contra Israel. Amaleq no odia a los judíos por lo que pasa en Israel. Por el contrario: odia a Israel porque odia a los judíos. El anti-sionismo es un antisemitismo disfrazado (“politically correct”).
  1. El punto más importante y práctico a tener en cuenta en nuestro enfrentamiento con Amaleq es que no es posible negociar con Amaleq. Debido a que Amaleq nunca estará satisfecho con tierra, dinero o incluso con que nosotros cambiemos nuestra religión (Piensen en la Shoa. Los nazis llevaban a matar aún a aquellos judíos que renegaban de su religión). Amaleq quiere que desaparezcamos, y punto. Los políticos israelíes están divididos precisamente en este punto: Todos en Israel desean vivir en paz. Pero algunos creen que la paz se puede alcanzar negociando con los palestinos. Otros creen que, al igual que Amaleq, los palestinos no van a dejar de atacarnos, aunque tengan su propio estado. Y cuánto más cerca estén, más peligroso será para nosotros. El mayor conflicto interno de la política israelí moderna consiste en identificar o no identificar a nuestros enemigos modernos con el Amaleq que nos advierte la Torá.
  1. Amaleq, por desgracia, no va a desaparecer. Para muchos judíos, especialmente para aquellos que no están familiarizados con el concepto de Amaleq, es extremadamente difícil reconocer y admitir la verdadera naturaleza de Amaleq. Y debido a que el comportamiento de Amaleq está más allá de la racionalidad, muchos educados (pero a mi entender ingenuos), gentiles o judíos, pensarán que algo “racional” debe motivar el odio de Amaleq hacia los judíos. Y dirán por ejemplo que los ataques terroristas son por culpa de los nuevos asentamientos en Jerusalem o algo así…

La Torá, previendo lo peligroso de la ingenuidad bien intencionada, no solo nos dice “Zajor” recuerda a Amaleq, en ese mismo texto repite su exhortación, con una expresión excepcional “al tishkaj”, ¡¡¡No te olvides!!! . No te olvides de su obsesión suicida y de su irracionalidad.

Nuestros Jajamim nos prescriben la lectura pública del texto de Amaleq mañana, Shabbat Zajor, el Shabbat anterior a Purim, porque Hamán fue el primer descendiente de Amaleq que intentó borrar a todo el pueblo de Israel del mapa. La Torá nos asegura que HaShem no dejará que Amaleq nos destruya. Pero también nos da a entender que no debemos ser ingenuos acerca de la verdadera naturaleza y las intenciones de Amaleq. Olvidarlo, nos puede costar muy caro.

Parashat ZAJOR tiene el estatus especial de ser un texto bíblico cuya lectura es un mandamiento directo de la Torá. Las mujeres también tienen la obligación de asistir a la sinagoga y escuchar Parashat Zajor.

Fuente: Fuente: halaja.org