La organización campesina, enemiga de la empresa ENERGUATE, mantiene una lucha en contra de la compañía de capital israelí desde hace años.

AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO

CODECA (Comité de Desarrollo Campesino), organización campesina de Guatemala, realizó manifestaciones el 9 de mayo donde se exhibían mantas con los siguientes mensajes:
Los judíos asesinaron al señor Jesucristo, ahora nos quieren asesinar con la energía eléctrica.
Los judíos me mataron en la cruz, ahora los judíos de Energuate están matando a mi pueblo de Guatemala con la luz. (“Hay de vosotros judíos hipócritas que violentais la justicia y el derecho de los pobres”, Mt. 23:23) ¡Fuera Energuate judía de Guatemala! ¡Vamos por la nacionalización de la energía eléctrica!

CODECA, organización enemiga de la empresa ENERGUATE, mantiene una lucha en contra de la compañía de capital israelí desde hace años. Esta organización pide la expropiación de las empresas energéticas de Guatemala. A simple vista pareciera tener una lucha legítima. Pero sus acciones dejan mucho que desear.

Los líderes de CODECA se hicieron con el control en varias comunidades indígenas y prohibieron la entrada de los trabajadores de la compañía ENERGUATE a sus territorios. Acto seguido, los líderes de CODECA empezaron a cobrar el suministro de luz por cuenta propia a los vecinos; acción que motivo que ENERGUATE no pudiera dar mantenimiento a la red de suministro y dejara a miles de usuarios sin energía eléctrica.

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Entre las acciones de CODECA destacan el secuestro de cinco trabajadores de la compañía ENERGUATE, los cuales fueron obligados a firmar un acta donde aceptaban no regresar al municipio de San Pedro Pinula. Con la ayuda de la Policía Nacional Civil, los trabajadores fueron liberados.

Mientras los líderes de CODECA cobraban el servicio de energía eléctrica en Chiantla, Huehuetenango. Los pobladores se armaron de valor y los capturaron para después entregarlos a la autoridad. Actualmente los líderes de CODECA están en la cárcel y es por esta razón que la organización se ha vuelto más agresiva y ha optado por tomar acciones más violentas.

A diferencia de lo que en algunos sitios se había informado, no parece ser realmente un caso de judeofobia por motivos religiosos. Realmente no está ninguna organización religiosa detrás de esto, sino que las causas son meramente políticas.

Por su parte, el periodista Luis Figueroa, en su blog CARPE DIEM, reprocha a las autoridades católicas y a derechos humanos el no haber condenado esta acción antisemita.

“Si la Procuraduría de los Derechos Humanos y la Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado de Guatemala no se sienten moralmente llamados a condenar y reprender los mensajes de odio, divisionismo y violencia potencial que ahora usa la dirigencia de CODECA, si las mismas organizaciones populares y campesinas que protestan contra el racismo y la discriminación no ven moralmente objetable el antijudaísmo, ¡sí sorprende! que mucha de la sociedad guatemalteca haya dejado pasar esos mensajes inadvertidos”, señaló.