En medio del desierto del Neguev en sur de Israel, se construye la torre solar más grande del mundo, reflejando grandes esperanzas para la energía renovable.

ESTI PELED PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – Una vez completada a finales de 2017, la Torre Ashalim tendrá una altura de 240 metros, más alta que la torre de Montparnasse de París y Gherkin de Londres, según informes del gobierno de Israel y del consorcio responsable de la construcción.

Cubierta de acero inoxidable, la torre en el desierto del Neguev con un pico similar a un faro gigante será visible a decenas de kilómetros de distancia.

Un campo de espejos que cubren 300 hectáreas – el tamaño de más de 400 campos de fútbol – se extenderá para dirigir la luz solar hacia el pico de la torre a un área llamada la caldera, parecida a una bombilla gigante.

La caldera, cuya temperatura se elevará a 600 grados Celsius, genera vapor que se canaliza hacia el pie de la torre, donde se produce la electricidad.

La construcción, con un costo estimado de 500 millones de euros ($ 570 millones), es financiada por la firma estadounidense General Electric, la francesa Alstom y el fondo de inversión privada israelí Noy.

El gobierno de Israel convocó una licitación para el proyecto en 2013, comprometiéndose a adquirir electricidad del mismo durante 25 años como parte de un cambio hacia la energía renovable e independencia energética.

La electricidad en Israel se genera en plantas que utilizan carbón, gas natural y gasóleo como combustible.

La planta solar requiere de una gran inversión, aunque los costos son cada vez menores.

La producción de energía de la torre solar es “dos a tres veces más costosa que la de centrales eléctricas clásicas que utilizan carbón o combustible”, indicó Eran Gartner, quien administra el proyecto del consorcio de Megalim.

La torre debe proporcionar 121 megavatios, o el dos por ciento de las necesidades de energía eléctrica de Israel, suficiente para una ciudad de 110,000 hogares.

El país de ocho millones de habitantes pretende utilizar energía renovable para el 10 por ciento de su consumo total hasta 2020.

La energía solar ofrece una alternativa limpia a las plantas eléctricas que utilizan carbón y combustible, que contribuyen al calentamiento global debido a las emisiones de CO2 que atrapan el calor.

En teoría, Israel podría satisfacer sus necesidades de energía eléctrica a través de la energía solar mediante el uso de sólo el cuatro por ciento del desierto del Negev, dijo Eitan Parnass, director de la Asociación de Energía Verde de Israel.

Los hallazgos de gas natural frente a las costas de Israel son un gran impulso hacia la independencia energética, pero Parnass dice que el país debe diversificar su independencia energética para evitar depender de una única fuente en el turbulento Oriente Medio.

Sin embargo, los críticos consideran que el proyecto es demasiado costoso y complejo que otras alternativas.La diputada de la Unión Sionista Yael Cohen-Paran, y co-presidente del Movimiento Verde, dijo que el proyecto es tan “demandante y costoso” que no puede ser replicado.

La energía solar ha formado parte de la vida en Israel desde hace años, ya que la mayoría de los tanques de agua se calientan a través de paneles solares.

La torre solar y su campo de espejos, una tecnología de energía solar térmica concentrada, es rentable como parte de un proyecto a gran escala, a diferencia de un campo fotovoltaico, donde cada panel actúa como un pequeño generador.

La torre Ashalim estará equipada de espejos 55.000, que ascienden a una superficie reflectiva de un millón de metros cuadrados. Los ingenieros han desarrollado reservas para almacenar el calor cuando no hay sol.

“Hemos triplicado el tamaño de los espejos en comparación con la generación anterior,” dijo Gartner.

“Todo está conectado por Wi-Fi en lugar de cables. La torre y su caldera también están diseñadas para reducir costos y optimizar la rentabilidad.”

Las torres solares ya se han construido en lugares como Marruecos, Sudáfrica y California, donde se encuentra la torre más alta en la actualidad con una altura de 137 metros en la localidad de Ivanpah del desierto de Mojave.

Fuente: The Times of Israel / Daphne Rousseau, AFP

Reproducción autorizada con la mención siguiente: © EnlaceJudíoMéxico