BURAK BEKDIL

“Aislaríamos internacionalmente a Israel en forma absoluta. Israel era un estado terrorista. “Ellos” sabían bien cómo matar. Israel estaba cometiendo limpieza étnica en Gaza. Se ajustarían cuentas a Israel por sus crímenes en Gaza.” Etc…

Los líderes de Turquía incontables veces han rugido en discursos atronadores sobre que Turquía pidió una disculpa, compensación para las familias de las víctimas del Mavi Marmara y la remoción del bloqueo naval a la Franja de Gaza.

En el 2012 este columnista, muy por casualidad, advirtió que cuando los grandes cañones estaban rugiendo acerca de las tres condiciones para la normalización, el sitio web oficial del Ministerio del Exterior turco tenía una narrativa diferente: Dos condiciones en vez de tres. Según la sección bajo “Israel,” “Turquía ha estado exigiendo una disculpa oficial y compensación de Israel a fin de normalizar las relaciones diplomáticas.

“Sin embargo Israel aún no ha cumplido estas demandas.” ¿Qué ocurrió con la tercera condición? ¿Por qué las condiciones del ministerio para la normalización eran diferentes de las del ministro del exterior (o el primer ministro)? Quizás el ministerio tuvo la visión que no tuvieron los políticos.

En el año 2013, el primer ministro israelí Benjamín Netanyahu se disculpó por los errores durante el operativo de las Fuerzas de Defensa de Israel en el Mavi Marmara – una medida sensible. Eso satisfacía la primera condición turca.

Después de tres años de negociaciones, aparentemente, la compensación para las familias de las víctimas – la segunda condición – también ha sido borrada de la lista de condiciones restantes. Ese fue un resultado racional también: Si hubo errores operativos que obligaron a un jefe de gobierno a disculparse y llevó a la pérdida de vidas, tiene que haber compensación para las familias de las víctimas.

¿Qué pasa con la tercera condición? En su sección “condición de Turquía para la remoción del bloqueo naval sobre Gaza”, un diccionario político moderno y actualizado probablemente dará la respuesta: Vean el ladrido y mordida de Turquía.

Antes de la remoción del bloqueo de Gaza, Turquía tenía permitido enviar cualquier material de ayuda humanitaria permisible a Gaza a través del puerto de Ashdod, de Israel. Ahora, después de la remoción del bloqueo tendrá permitido enviar cualquier material de ayuda permisible a Gaza a través del puerto de Ashdod, de Israel. ¿No es eso muy bueno?

Y no sólo eso. Los islámicos turcos pueden ahora enviar flotillas de ayuda para romper el bloqueo y ayudar a sus hermanos gazatíes – hasta el momento donde serán detenidos por una plataforma militar israelí, esperemos que esta vez en forma no violenta. ¿No es eso maravilloso? Lo es, aunque es también curioso porque, a excepción de un gracias seco de Hamas los gazatíes no han salido a las calles en grandes cantidades y celebrado la victoria por la remoción del bloqueo.

Con o sin el levantamiento del bloqueo a Gaza, la distensión turco-israelí fue una racionalidad geopolítica aunque está expuesta al riesgo de futuros entendimientos y distensiones.

La distensión no marcará un retorno a los días de amistad entre viejos amigos. En cambio, será un acercamiento frágil y hostil. Como escribí recientemente para el Instituto Gatestone, “Con toda probabilidad, la ‘paz’ entre Turquía e Israel se parecerá a la definición de paz en el Diccionario del Diablo de Ambrose Bierce: ‘En los asuntos internacionales, un período de engaño entre dos períodos de lucha’ – a pesar que el contexto para la paz parezca increíblemente (pero maliciosamente) conveniente.”

Al mismo tiempo, la mejora de los envíos turcos para Gaza desde el muy difícil e indeseado puerto de Ashdod al muy conveniente puerto de Ashdod será recordada como una de las más espectaculares victorias diplomáticas de Turquía de este siglo. Esta victoria fue sólo eclipsada amargamente por los gazatíes desagradecidos que no la celebraron con los aplausos y alegría que se merecía.

Fuente: Hurriyet
Traducido por Marcela Lubczanski para Enlace Judío México