RAOUL WOOTLIFF
Un día después de la muerte accidental del soldado solitario nacido en Estados Unidos, los reclutas están deseosos de emigrar como parte del grupo de 218 efectivos del vuelo Nefesh B’Nefesh

SILVIA SCHNESSEL PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – Dejar su casa, mudarse a más de 7.500 millas de su familia y amigos, y comenzar una nueva vida en un país que sólo ha visitado una vez no asusta a Steven Rich.

Esperar en el aeropuerto internacional JFK su vuelo de “aliá” a Israel, lo único que ponía nervioso a este corpulento super tatuado ex marine estadounidense era el viaje.

“No puedo decir que esté nervioso por nada en Israel”, dijo Rich el lunes por la mañana antes del despegue. “Pero realmente no me gusta volar tanto”.

Después de dos viajes a Afganistán cuando se incorporó al cuerpo de marines de Estados Unidos en 2010, con 24 años, Rich ha tenido que soportar cientos de viajes en avión. Algunos los pasó durmiendo en el piso en la parte trasera de un avión de carga – pero ninguno como el vuelo del lunes de Nueva York a Tel Aviv.

Rich se unió a otros 217 norteamericanos que emigran a Israel en un avión especialmente fletado por la organización sin fines de lucro Nefesh BaNefesh. A bordo había 29 familias, entre ellos 103 niños y cinco pares de gemelos.

El vuelo era uno de los varios que vuelan cada año organizados por Nefesh BaNefesh en colaboración con el Ministerio de Absorción y la Agencia Judía, llevando miles de inmigrantes a Israel.

Fundada en 2002 por el rabino Yehoshua Fass y el empresario americano, Tony Gelbart, Nefesh BaNefesh tiene como objetivo fomentar la inmigración occidental a Israel facilitando el proceso a los judíos americanos y británicos. De acuerdo con Nefesh BaNefesh, hasta el momento han llevado a Israel cerca de 50.000 inmigrantes.

El último grupo de inmigrantes procede de Arizona, California, Florida, Indiana, Kentucky, Maryland, Massachusetts, Missouri, Nevada, Nueva Jersey, Nueva York, Ohio, Ontario, Pennsylvania, Quebec, Texas, Virginia, el estado de Washington, Washington, DC, y Wisconsin.

Para algunos de los que están a bordo, como Tatyana Yassenov de 71 años, la persona de más edad entre los nuevos inmigrantes del martes, la decisión de trasladarse a Israel la tomó después de años de consideración.

“Siempre quise hacer aliá y estoy muy contenta de unirme a mi hermano y sobrina en el norte de Israel”, dijo Yassenov, una de los 31 nuevos inmigrantes que se instalarán en las regiones de Galilea o el Negev como parte de las campañas de Nefesh BaNefesh “Ve al Norte” y “Ve al sur”.

La ceremonia en el aeropuerto JFK antes del despegue fue un esfuerzo de reclutamiento de asistencia entre amigos y familiares, ya que era una despedida para los que hacían el viaje.

Gelbart dijo a los nuevos inmigrantes durante la espera que sus familias pronto “seguirán sus pasos”. El embajador de Israel ante la ONU, Danny Danon, alabó la decisión de trasladarse a Israel como la mejor respuesta a los esfuerzos por deslegitimar el país.

El ex-marine de Estados Unidos, Steven Rich antes de embarcar en un vuelo de Nefesh BaNefesh a Israel desde Nueva York, 18 de julio de 2016. (Shahar Azran)
El ex-marine de Estados Unidos, Steven Rich antes de embarcar en un vuelo de Nefesh BaNefesh a Israel desde Nueva York, 18 de julio de 2016. (Shahar Azran)

“Lo que están haciendo hoy es la verdadera respuesta para los que critican a Israel. Es la respuesta a los que apoyan el BDS [movimiento de Boicot Desinversión y Sanciones contra Israel]. Hacer aliá es la respuesta a todos los enemigos del Estado de Israel”, dijo Danon ante el aplauso de los futuros israelíes.

Después de dejar el cuerpo de infantes de marina hace sólo 14 meses, para Steven Rich la idea de mudarse a Israel surgió rápidamente.

“Al cuarto día del viaje de Birthright le dije a mi amigo, ‘Creo que vendré a vivir aquí'”, dijo Rich en su primer viaje a Israel, exactamente un año antes del vuelo del lunes.

“Antes nunca había imaginado que vendría a vivir aquí. Cuando dejé el cuerpo de marines sólo pensaba en ir a la universidad y quedarme en Estados Unidos. Nunca soñé que al cabo del año me estaría mudando”, dijo.

Creció en un “hogar judío normal” en Los Ángeles, California, dice que nunca fue religioso, pero “siempre sentí que el judaísmo era mi cultura”.

mezuzá
Una mezuzá colgante con las placas de identificación de marine de Steven Rich, usada por primera vez por su abuelo en la Segunda Guerra Mundial, 18 de julio de 2016. (Raoul Wootliff)

En el bolsillo Rich tenía para el viaje una pequeña mezuzá junto a las placas de identificación como marine. El colgante de plata, tradicionalmente con pasajes de la Biblia que se coloca en el dintel de la puerta de las casas judías, fue del abuelo de Rich como médico de combate durante la Segunda Guerra Mundial.

Cuando se alistó a los marines al terminar la escuela secundaria, Rich se enfrentó a un “choque cultural” como el único recluta judío de su pelotón de 1,200 miembros, algunos nunca habían conocido a un judío.

“En Afganistán, mi unidad constaba de más de 1.200 marines y mi señal de llamada en radio era simplemente ‘judío’ porque era el único”, dijo. “Nunca fue ofensivo. Simplemente viene con el territorio”.

Cuando dejó el ejército, Rich volvió a enfrentarse a una sensación extraña. Sólo en Israel, dijo, donde la gente lo entendía tanto como judío como ex soldado, se sintió realmente comprendido.

“En Estados Unidos cuando vuelves del ejército apenas el 1 por ciento de la nación realmente sabe lo que has pasado. Era difícil adaptarse. En Israel es diferente, simplemente sientes que perteneces al lugar”, dijo.

Entre los nuevos inmigrantes más jóvenes había 8 de 18 a 27 años que se alistarán inmediatamente en las Fuerzas de Defensa de Israel como parte del programa Garin Tzabar, que los ubica en las unidades del ejército.

Aviad Karmazyn dice adiós a su padre antes de embarcar en un vuelo fletado por Nefesh BaNefesh a Israel desde Nueva York, 18 de julio de 2016. (Shahar Azran)
Aviad Karmazyn dice adiós a su padre antes de embarcar en un vuelo fletado por Nefesh BaNefesh a Israel desde Nueva York, 18 de julio de 2016. (Shahar Azran)

Los reclutas que vienen a Israel sin familia se conocen como “soldados solitarios” y recibirán apoyo tanto del ejército como de Nefesh BaNefesh.

Maya Hazon, de 19 años, de California, viajó del aeropuerto Ben Gurion al Kibbutz Kissufim en el norte del país, donde residirá.

“Quiero dar algo a cambio”, dijo Hazon sobre su decisión de alistarse. “Creo que me dará sensación de pertenencia y de que vale la pena pertenecer. Espero sentir que aporto algo”.

Shlomo Rindenow (Facebook)
Shlomo Rindenow (Facebook)

El domingo, el sargento. Shlomo Rindenow, un soldado solitario que hizo aliá con Nefesh BaNefesh de Nueva Jersey en 2014, murió por la explosión de una granada junto a su compañero de las FDI Hussam Tafesh. El ejército sigue investigando las circunstancias.

Al preguntarle si el incidente le hizo dudar en venir, Aviad Karmazyn, nativo de Indiana de 19 años, que planea entrar en una unidad de combate, dijo que a pesar de que daba miedo, creía que era parte de servir en el ejército.

“Una vez que te das de alta, es parte del trato”. Dijo Karmazyn. “Espero aportar motivación. Tal vez un israelí que lo pasa mal aquí llegue a pensar: “Hay un chico aquí que vino desde los EE.UU. sólo para estar aquí, así que si él puede hacerlo, yo también puedo'”.

1500 los recibieron
1.500 personas asisten a una ceremonia de bienvenida a 218 nuevos inmigrantes de América del Norte que viajaron a Israel en un vuelo fletado por Nefesh BaNefesh, 19 de julio de 2016. (Shahar Azran)

Los sentimientos de pertenencia, de realización y de inspiración expresados por Steven Rich, Tatyana Yassenov, y Aviad Karmazyn se reanudaron en la ceremonia festiva que recibió a los recién llegados en Israel.

Hablando a las 1.500 personas reunidas para darles la bienvenida con cantos, bailes y banderas, la ministra de Inmigración y Absorción Sofa Landver dijo que se identificaba con los nuevos israelíes y sus ojos llorosos.

“Hace treinta y tres años vine en avión y tuve la misma sensación que tienen ellos. Gracias a Dios por el estado de Israel”, dijo de su propia aliá de la Unión Soviética. “¡Bienvenidos! ¡No están solos! ¡Estamos con ustedes!”

El Presidente del Comité de la Knesset Avraham Aliyah Neguise, que vino de Etiopía a los 27 años, también habló de su propia experiencia.

“Estaba en la misma situación de ustedes hace 31 años, cuando llegué a Israel como inmigrante y les digo que ustedes también pueden y serán los próximos miembros de la Knesset y los ministros de este país”, dijo desde el podio.

En el exterior, aún de pie en la pista en el pesado calor del centro de Israel, Steven Rich exudaba tanto cansancio como alegría.

“Siento que llegué a casa en Israel”, dijo con la voz entrecortada el por lo general duro ex marine.

Cuando le preguntaron por el viaje, dijo que se había olvidado de su miedo a volar.

Fuente: The Times of Israel – Traducción: Silvia Schnessel – Reproducción autorizada con la mención: ©EnlaceJudíoMéxico