Una sola dosis de una nueva molécula desarrollada por investigadores de la Universidad Hebrea logra proteger al cerebro de inflamación, muerte celular y alteraciones cognitivas que suelen producirse por una lesión cerebral traumática leve (LCTL).

ESTI PELED PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – Este tipo de lesiones se producen con frecuencia en niños y adultos, atletas y personas de edad en particular por un golpe o un violento estremezón a la cabeza. Pero debido a que los signos externos o el daño cerebral estructural no es aparente, la LCTL es difícil de diagnosticar. Sin embargo, puede causar dificultades cognitivas, emocionales y de comportamiento asociadas con cambios bioquímicos y celulares.

Mientras que los síntomas de la LCTL tienden a desaparecer en días o semanas la mitad de los pacientes experimentan síntomas psicológicos, alteraciones cognitivas subjetivas y dolores corporales incluso un año después.

Actualmente no existe un tratamiento efectivo para los pacientes con LCTL.

“Las lesiones externas o internas producen inflamación celular que puede causar muerte celular a través de las vías de las proteínas quinasas activadas por mitógenos (MAPK), involucradas en las respuestas celulares que provocan la inflamación en las células cerebrales,” explica la profesora Daphne Atlas, del Departamento de Química Biológica en el Instituto de Ciencias de la Vida Alexander Silberman en la Universidad Hebrea de Jerusalem.

“Por lo tanto, para revertir los efectos de la LCTL, es esencial calmar las vías inflamatorias.”

En su laboratorio de Jerusalem, Atlas desarrolló nuevas moléculas que derivan del compuesto activo del TRX1, llamadas péptidos miméticos-thioredoxin (péptidos-TXM).

Thioredoxin ( TRX1) es una proteína importante que mantiene la oxidación/estado reducido de las células. En su forma reducida, se une a otra proteína llamada ASK1, que se libera con la oxidación del TRX1, activando una cadena de reacciones enzimáticas que provocan la inflamación.

Se ha demostrado que los nuevos péptidos miméticos-thioredoxin protegen a las células de muerte temprana a través de la activación de las vías inflamatorias. Estos péptidos constan de tres o cuatro aminoácidos (compuestos orgánicos que se combinan para formar proteínas) y se activan de dos maneras: imitan la actividad antioxidante del TRX1 e inhiben la actividad de enzimas llamadas MAPK dentro de la vía inflamatoria, evitando la inflamación y la muerte celular.

“Esta investigación demuestra el potencial de los péptidos-TXM para reducir significativamente el deterioro cognitivo causado por una lesión cerebral traumática leve,” señaló Atlas.

“Se requieren más estudios a fin de establecer y examinar el potencial de una sola dosis de péptidos-TXM para prevenir daños si se administra incluso una hora después del traumatismo cerebral. Por ejemplo, en casos de encefalopatía traumática crónica observada en jugadores de fútbol estadounidenses con múltiples conmociones cerebrales y otros tipos de golpes en la cabeza,” sugirió.

“Otra ventaja de utilizar péptidos es que reducen significativamente el riesgo de causar efectos tóxicos, ya que consisten de aminoácidos que son bloques naturales que comprenden proteínas celulares, en contraste con el uso de medicamentos que no son naturales. TXM-CB3 y TXM-CB13 son tratamientos que pueden prevenir los efectos secundarios que afectan las funciones cerebrales,” concluyó Atlas.

Fuente: The Jerusalem Post / Judy Siegel

Reproducción autorizada con la mención siguiente: © EnlaceJudíoMéxico