GIULIO MEOTTI

Hay una guerra, pero solo los atacantes la están librando. Europa solo quiere que la dejen en paz.

SILVIA SCHNESSEL PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – El Wall Street Journal ha publicado un articulo chocante del Director General de Inteligencia en Francia, Patrick Calvar, que revela lo que tiene en mente.

“La confrontación es inevitable”, dice el señor Calvar. Se calcula que hay unos 15.000 salafistas entre los 7 millones de musulmanes de Francia, “cuyo credo radical fundamentalista domina muchos de los proyectos residenciales de los musulmanes en los bordes de ciudades como París, Niza o Lyon.

Sus clérigos llaman a una guerra civil, encargando a todos los musulmanes que borren de las calles a los que no profesan su fe”.

Sí, Francia se dirige hacia la confrontación inevitable. 84 adultos y niños acaban de ser torturados hasta la muerte en Niza por el camión cuyo conductor dijo al guardia que transportaba helados para celebrar la fiesta de los valores igualitarios.

Un gesto aparente de histeria mortal, y de hecho, una masacre espantosa espectacular celebrada por la Yihad internacional y por varios musulmanes europeos.

Mientras, como respuesta, Europa solo renovó su fachada de vacua retórica. Miren las declaraciones de los dirigentes franceses tras el ataque de Charlie Hebdo, los restaurantes y el teatro de París y ahora, Niza. Siempre son idénticas.

Nadie está luchando de verdad esta guerra. Europa solo quiere que la dejen en paz.

Sobre las cenizas de las Torres Gemelas, George W. Bush se puso en pie para luchar. En aquellos años, EEUU y sus aliados europeos se demostraron a sí mismos que eran el “caballo más fuerte“ y las fuerzas del “caballo más débil“ de Al Qaeda empezaron a perder fuelle.

Cuando los islamistas fueron relegados a la defensiva, los reclutas se redujeron, los ataques en ciudades occidentales disminuyeron.

Tras 8 años de Barak Hussein Obama y la retirada de Europa de la lucha contra el terror, Occidente parece ser el caballo débil y los islamistas el fuerte.

Hace unos días, pregunté al Profesor Bruce Thornton de la Universidad Estatal de California, qué debería hacer Europa para invertir esta horrible tendencia. Su respuesta fue reveladora:

“No hay voluntad política para lanzar una guerra total contra ISIS. Requeriría 100 000 tropas y un bombardeo masivo para eliminar la mayoría de los yihadistas posible. Tendríamos que abandonar las reglas del combate que dan privilegio al pueblo enemigo contra nosotros. En casa, tendríamos que aumentar las deportaciones y públicamente pedir que las comunidades Musulmanas en Occidente desaprueben el yihadismo y la ley de la Sharia”.

Por supuesto, Europa y Occidente no están adoptando ninguna de estas medidas importantes y claramente relacionadas.

  • Los radicales islamistas ya se han infiltrado en las universidades de Europa, en las Mezquitas y en las afueras de las ciudades.
  • El Islam institucional ha logrado convencer a los europeos de que el terror “no tiene nada que ver con el Islam”
  • La mayoría de los medios se niegan siquiera a susurrar el nombre del enemigo y está justo preparando nuevos artículos sobre la próxima víctima de la Yihad.
  • El Papa Francisco está ocupado pidiendo clemencia para todos.
  • El resto de la población judía europea está huyendo del viejo continente.
  • Los ejércitos de Europa se están reduciendo día a día.

Abandonen cualquier esperanza: Sin una revolución cultural de grandes dimensiones, y una confrontación, Europa está perdida, los islamistas ganarán. Y mientras ocurre, iremos cediendo más nuestras libertades y nuestra civilización a la Gran Yihad.

Fuente: Arutz Sheva – Traducción: Silvia Schnessel – Reproducción autorizada con la mención: ©EnlaceJudíoMéxico