El gobierno galo busca con esta medida que el Islam en Francia “sea compatible con los valores de la República”

SILVIA SCHNESSEL PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – Bernard Cazeneuve, ministro francés de Interior, afirmó este lunes que se seguirán cerrando mezquitas y centros de rezo musulmanes, como ya han hecho con otros veinte centros donde se profieren discursos radicales y, en caso de que sus imames sean extranjeros, serán expulsados de Francia.

“No hay lugar en Francia (…) para quienes provocan odio”, subrayó Cazeneuve a la prensa al finalizar un encuentro con los responsables del Consejo Francés del Culto Musulmán (CFCM) en el marco de la lucha contra el yihadismo tras los últimos atentados cometidos en Francia.

El ministro informó que ya se había decidido el cierre de unas veinte mezquitas o centros de rezo y a la vez anunció que “habrá más”.

En la misma línea, se han dictado 80 órdenes de expulsión contra imames extranjeros por sus discursos radicales, y anunció que “varias decenas” de expedientes están siendo examinados y que su política continuará en esa línea.

Más allá de la dimensión punitiva, el ministro con competencias en las relaciones con las religiones anticipó que en octubre debería estar listo el nuevo marco institucional con el que se quiere dotar al culto musulmán.

Dicho marco pasa por crear una “fundación” que financie los centros de culto, que actualmente reciben fondos de mayoritariamente de países extranjeros (como Arabia Saudita) a los que se reprocha introducir una concepción religiosa oscurantista alejada de las prácticas francesas.

Cazeneuve ha insistido en su voluntad de “garantizar plena transparencia en la financiación de las mezquitas”, después que el primer ministro, Manuel Valls, dijera la semana pasada que se ha de cortar el flujo de fondos del extranjero.

La misma fundación servirá también para obtener ayudas para estudios, tesis y becas de los religiosos que quieran realizar estudios universitarios complementarios.

Otro aspecto importante del dispositivo que prepara el Gobierno galo es la formación de los imames y capellanes de las cárceles, para lo que el CFCM ha creado un “consejo teológico”.

El objetivo, según el titular de Interior, es “tener teólogos de alto nivel que, partiendo de una referencia precisa, formen a los imames franceses” a fin de que “impartan un islam (…) compatible con los valores de la República”.

El presidente del CFCM, Anouar Kbibech, ha precisado que el cometido de ese consejo teológico será combatir los discursos radicales que circulan por internet y establecer una “carta de los imames” sentando las bases para los discursos en las mezquitas.

Fuente: El Mundo – © EnlaceJudíoMéxico