CNAAN LIPHSHIZ

Aunque la estación de verano en el norte de Europa puede ser breve, los días de verano aquí parecen interminables debido a cuán tarde se pone el sol.

En la capital noruega de Oslo, por ejemplo — la cual tiene una latitud que está apenas 4 grados al sur de Anchorage, Alaska — el solsticio de verano a fines de junio trae casi 19 horas de luz de día. Para mediados de agosto baja a 15 horas, 36 minutos — cerca de dos horas totales más que en New York.

Estas son buenas noticias para los escandinavos excursionistas y hambrientos de sol — después de todo, un rasgo de los inviernos amargamente fríos de Oslo son las horas agotadoramente largas de oscuridad.

Pero los días largos llegan con sus propios desafíos para los judíos y musulmanes observantes del norte de Europa, quienes en algunos días ayunan según cuando el sol sale o se pone. Eso ocurrirá para los judíos en Tisha b’Av — un día anual para hacer duelo por la destrucción del Templo Judío que este año comienza al ponerse el sol el sábado y continúa hasta el anochecer del día siguiente.

“Es por lejos el ayuno más duro del año por el día largo y el calor,” dijo Yanki Jacobs, un rabino de Jabad en Amsterdam, donde la puesta del sol terminará después de las 10 p.m. la semana próxima.

“Definitivamente hace una diferencia si puedes comer a las 8 p.m. o a las 11,” dijo Jacobs, quien también confió que está esperando un fin de semana fresco y lluvioso porque “es más difícil ayunar cuando hace calor.”

Rab Joav Melchior, el gran rabino de Noruega, concuerda con la opinión de Jacobs acerca de Tisha b’Av como el ayuno más duro del año.

“En principio no debe ser más difícil ayunar en verano porque el ‘iom tov’ [‘festividad’ en hebreo’] también empieza tarde,” dijo Melchior, quien creció en Israel.

Pero en la práctica, “se siente mucho más largo en el norte debido a que las puestas del sol, que en Israel toman unos 20 minutos, se extienden por horas en Noruega,”dijo.

En Holanda, donde las cenas son servidas en la hora relativamente temprana de 6 p.m., muchos judíos están acostumbrados a acostarse mucho antes que comience Tisha b’Av — dejándoles la opción o de permanecer levantados tarde para llenarse de comida o ayunar por bastante más de 24 horas.

En este sentido, los judíos observantes de Escandinavia están en el mismo barco que los musulmanes observantes, quienes languidecen hasta más tarde en la noche siempre que el mes de Ramadán, cuando los musulmanes sólo comen y toman después de la oscuridad, cae durante el verano.

Pero un día largo es sólo parte de la razón por la que el ayuno de Tisha b’Av parece más difícil que el de Yom Kipur, el Día de Expiación para los judíos, que ocurre en otoño, según Melchior.

“En Yom Kipur, pasas el día entero en el shul, rezando, pensando, reflexionando con otros,” dijo. “Ni siquiera te das cuenta que estás ayunando porque tienes tantas otras cosas en tu mente.”

Pero Tisha b’Av es una festividad “mucho menos central” para la judería noruega, lo que “significa que pasas mucho tiempo solo, ayunando en tu propia casa y terminando de advertir que, de hecho, estás ayunando y no puedes comer o beber.”

En Noruega, las leyes gubernamentales acerca de las festividades no alientan exactamente el ayuno en Tisha b’Av, según Melchior.

“Los no cristianos tienen derecho a dos días libres anualmente por ley, cuando el Judaísmo tiene seis a ocho días en que no está permitido el trabajo”, dijo.

Si bien muchos empleadores permiten a los judíos y musulmanes observantes tomar días extra por consideración a su fe, la mayoría reserva esos días para vacaciones vistas como más significativas religiosamente.

Según Jacobs, en Holanda, la consciencia del público acerca de Ramadán, cuando los empleadores a menudo toman en consideración las necesidades de sus empleados musulmanes aun cuando no es requerido legalmente, ha aumentado también la consciencia de los días de ayuno judío.

Pero este no es un acontecimiento sentido por Melchior en Oslo.

“Muy a menudo,” dijo, “la reacción en la sociedad noruega ante los días de ayuno judíos es: ‘¿Qué, ustedes muchachos, ayunan también?’”

Fuente: JTA
Traducido por Marcela Lubczanski para Enlace Judío México