JORGE JUÁREZ PEÑAFLOR

En el artículo anterior escribía que Israel rescatará a Europa del terrorismo musulmán, espero que la tolerancia religiosa también contribuya.

Cuando un imperio o país quiere imponer por la fuerza bruta una religión e ideología hay un retroceso para la evolución de la humanidad en todos los aspectos; religiosos, sociales, culturales y científicos. Ninguna religión fundamentalista ha dado plena libertad al hombre para pensar, dudar y cuestionar si esa religión es buena o está llena de idolatría, fanatismo, y además, los musulmanes no tienen tolerancia hacia otros credos, como sucedió desde que Constantino se hizo cristiano promoviendo el monoteísmo en el Imperio Romano.

Cuando el Imperio Romano sucumbió ya no había tolerancia, puesto que hubo una guerra civil impulsada por los fanáticos cristianos que no aceptaban otra religión; incluso, la religión de los judíos, que los cristianos tomaron de sus evangelios, era cuestionada; además los acusaron de deicidas (asesinos de Dios), durante muchos siglos fueron perseguidos y asesinados por ser judíos, pero ni por la fuerza bruta los cristianos pudieron quitarles sus creencias que vienen desde Abraham y Moisés.

Martín Lutero, que traicionó a la Iglesia Católica, hizo su propia religión Protestante, y tampoco pudo convencer a los judíos para que se unieran con la nueva religión, a pesar que ya no tenían santos, ni vírgenes, ni tampoco adoraban a estatuas. Los judíos no aceptaron lo que Lutero les ofreció para que se pudieran integrar al cien por ciento con los alemanes protestantes y hacer fuerza para cambiar la religión Católica que no promueve lo que dijo Cristo…

Como los judíos no aceptaron, fueron condenados por Lutero, como lo había hecho el catolicismo; para los judíos no era algo nuevo ya que siempre habían sufrido persecuciones, expropiaciones y tortura por la Santa Inquisición Católica y Española.

El Renacimiento, que empezó en Italia, vino a dar ciertas luces donde renacieron las bellas artes que estaban prohibidas por la religión católica, donde la pintura estaba enfocada en las cuestiones de los ángeles, los diablos y Dios para tener sometidos a los creyentes, ya que la mayoría no sabía leer.

La Revolución Francesa promovió la libertad, donde todos los seres humanos nacen libres, soberanos y pueden unirse para crear un Estado. Por primera vez los judíos gozaron de libertades para poder trabajar en lo que fuera, ya que antes los judíos no podían trabajar con el estado, no podían ser agricultores ni tener tierras, es decir, fueron segregados de los mejores trabajos que eran para los cristianos.

Los ilustrados franceses, como los ingleses, empezaron a promover la tolerancia donde John Locke hizo las “Cartas Sobre la Tolerancia” de 1689 a 1690, concepto de libertad individual y tolerancia religiosa. Pasó más de medio siglo para que el filósofo Voltaire (1763) escribiera un “Tratado Sobre Tolerancia”. Por tanto, sin tolerancia no podría haber Estado, ya que la tolerancia dentro de cualquier gobierno civil es fundamental para tener democracia, lo que no tienen los países árabes.

Los países árabes tienen una teocracia donde no existe la tolerancia a otros credos como es en Europa, que tuvo que vivir un baño de sangre por el fanatismo religioso durante casi 2000 años, desembocando en una ominosa ideología del nazismo que provocó la Segunda Guerra Mundial y un genocidio de 6 millones de judíos.

En este pequeño recorrido por la historia del fanatismo podemos analizar que la tolerancia entre los católicos y los protestantes floreció en Europa; las ciencias, las bellas artes y la libertad de expresión y asociación religiosa, que no tienen los países árabes. Los europeos han tolerado a los radicales musulmanes, que aprovechan esa libertad para incitar y promover la intolerancia religiosa y la Guerra Santa (Yihad) contra cristianos y judíos.

Los europeos han estado confiados o piensan que los árabes son pacíficos, como lo expresan algunos mandatarios, incluso cuando los terroristas musulmanes tumbaron las Torres Gemelas y han matado a inocentes ciudadanos.

La tolerancia debe de tener un límite, ¿por qué yo no puedo llegar a Europa e incitar a una rebelión contra el gobierno francés? Que es lo mismo, pero utilizando la religión para conseguir los fines maquiavélicos que se han propuesto los radicales del islam.

P. D. Voltaire promovió la tolerancia entre los católicos y los protestantes, pero no hacia los judíos ya que él era un recalcitrante antisemita.